VÍDEO DIFUNDIDO POR AFRICA GEOGRAPHIC
En julio, Walter Palmer mató en las proximidades del Parque Nacional de Hwange a Cecil, el león más fotografiado por los turistas de esa reserva africana. El felino recibió primero el impacto de una flecha lanzada con arco y finalmente falleció por el disparo de un rifle. Además Cecil fue encontrado sin piel y sin cabeza, algo que ha sido interpretado como el trofeo del cazador.
Sin embargo, el animal, de 13 años, ha dejado una gran familia en Zimbabue y se han podido filmar y fotografiar a parte de los cachorros y que serían nietos del famoso felino.
Africa Geographic ha difundido ahora, a través de su página en Youtube, el vídeo editado de Xanda, una de las hijas de Cecil y de algunos de sus cachorros.
La muerte del animal se hizo viral en todo el mundo y provocó la indignación de la mayoría de la población. De hecho, el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos, abrió una investigación sobre la muerte del león.
Aunque el animal no estaba protegido por la ley de EEUU, ya que la cacería tuvo lugar en África, las autoridades estadounidenses aseguraron que "comparten" el interés de Zimbabue en la protección de las especies amenazadas, y además investigan si la muerte del león pudo estar conectada con una red ilegal de tráfico de animales.
Walter Palmer, el dentista estadounidense que acabó con su vida, afirmó que desconocía que el animal fuera tan querido. Las autoridades de Zimbabue no le imputaron ningún delito porque contaba con los permisos oficiales para llevar a cabo la polémica caza.
Palmer, de 55 años y natural de Minesota, esgrimió precisamente los permisos obtenidos como eximente de responsabilidades. Asimismo, negó que tuviese constancia de que la pieza que iba a cazar era el león Cecil, un animal icónico del Parque Nacional Hwange.
En el banquillo sí se sentarán, en cambio, dos ciudadanos zimbabuenses acusados de atraer a Cecil fuera del Parque Nacional Hwange para facilitar su caza.