A MENOS DE 45 DÍAS
El ministro británico para el 'brexit', Stephen Barclay, ha asegurado que la intención del Gobierno es salir en la fecha prevista. El ministro ha ofrecido garantías a sus colegas del Partido Conservador defensores de un 'brexit' duro, que amenazan con abstenerse en la votación de esta tarde y provocar así el rechazo del texto.
Dado que la moción no es vinculante, esto no afectaría a los planes de la primera ministra, Theresa May, pero sí socavaría su autoridad en las negociaciones con la UE. Planes por cierto, nos cuenta la jefa de Internacional, se hablan en la barra de un bar.
La moción de este jueves simplemente pide al Parlamento respaldar el enfoque adoptado el 29 de enero, pero los "tories" rebeldes dudan en secundarla porque ese día también se aprobó una enmienda que rechaza una salida de la UE sin pacto, opción que ellos quieren mantener sobre la mesa.
La cámara votará primero tres enmiendas, encabezadas por la del Partido Laborista, que pide a May someter a votación su acuerdo definitivo de "brexit" el 27 de febrero. Otra enmienda del Partido Nacionalista Escocés (SNP) pide retrasar tres meses la fecha de salida y una tercera de la diputada conservadora Anna Soubry, que tiene opciones de prosperar, reclama al Gobierno que haga público su análisis sobre el impacto de una salida no pactada.
May negocia actualmente con la UE cambios en la salvaguarda irlandesa, principal escollo para que se apruebe su pacto, y se ha comprometido a convocar la votación de otra moción en los Comunes si para el 26 de febrero no ha logrado mejorar su texto.
Aunque Bruselas ha dicho que no renegociará el tratado, rechazado inicialmente por el Parlamento británico el 15 de enero, no descarta ofrecer garantías en la declaración sobre la futura relación comercial bilateral.