EL GOBIERNO GALO LO DESMIENTE
La alcaldesa de Calais, Natacha Bouchart, ha advertido de que la salida de Reino Unido de la Unión Europea implica que las autoridades británicas tendrían que recibir a los miles de refugiados que permanecen en los campamentos de la ciudad francesa, aunque posteriormente las autoridades de París han indicado que el acuerdo bilateral fronterizo entre ambos países, el Acuerdo Le Toucquet, y que rige precisamente la gestión de los inmigrantes, permanecerá inalterado.
"Los británicos deben vivir con las consecuencias de sus decisión", declaró Bouchart, quien estimó que "Francia se encuentra ahora en una posición negociadora lo suficientemente fuerte" como para conseguir ese objetivo.
"Los británicos deben vivir con las consecuencias de sus decisión"
A las palabras de Bouchart se han sumado las del ex ministro y líder conservador de la región de Hauts-de-France (que incluye a Calais), Xavier Bertrand, quien ayer por la noche tuiteó que "los ingleses querían recuperar su libertad, ahora tienen que recuperar su frontera. Pido a (el presidente francés) François Hollande que denuncie los acuerdos de Le Toucquet".
El Gobierno francés se ha apresurado a desmentir cualquier alteración del acuerdo bilateral que, recuerdan, no está sujeto a la normativa de la Unión Europea. "Seamos serios", declaró el ministro de Exteriores galo,
Jean Marc Ayrault, poco después de que el portavoz del Gobierno, Stephane Le Foll, descartara completamente cualquier modificación de los acuerdos. "Vamos a dejarlo claro: la salida de Reino Unido de la UE no alterará los tratados bilaterales que tenemos con ellos", aseguró el portavoz.