DE MOMENTO HAY 63 MUERTOS
El alcalde de la localidad lusa de Ansião, Rui Rocha, una de las afectadas por el incendio que sigue activo en la comarca de Pedrógrão Grande, en el que han muerto 62 personas, alertó de que será necesario "un trabajo muy grande" para recorrer todas las aldeas afectadas, pues no se ha llegado a todas.
En la zona abrasada por las llamas, advirtió, existen numerosas alquerías en lugares muy abruptos por los que ha pasado el incendio y a las que aún no han llegado los medios terrestres para ver si hay víctimas. Rocha explicó que "es necesario llegar a todo el territorio para ver si hay más víctimas en las pequeñas aldeas", repartidas por la Sierra de Lousã y la cuenca del río Zezere.
Para el regidor, la causa de la tragedia que se desencadenó el pasado sábado fue la "confluencia de muchos factores". "Las condiciones atmosféricas no fueron normales", a juicio de Rui Rocha, quien considera que "es una catástrofe nunca vista".