Las inundaciones se han llevado por delante viviendas enteras
Las tormentas que han azotado la isla de Kyushu sobrepasaron los 120 milímetros por hora y el agua acumulada en las prefecturas de Fukuoka y Oita, las más afectadas, superó los 540 milímetros (1,5 veces más que la media de todo julio).
Este organismo advirtió de que las lluvias suponen uno de los mayores desastres naturales en el país en las últimas décadas, y prevé que continúen las precipitaciones el sábado, por lo que aún se mantiene el nivel máximo de alerta en gran parte de Kyushu.
Unos 7.800 efectivos de las fuerzas de Auto-Defensa niponas, los bomberos y la policía participaron hoy en las labores de asistencia a los evacuados, así como de búsqueda y rescate de las personas que continúan desaparecidas.
En las últimas horas se han hallado nueve víctimas mortales más que elevan por ahora el balance de fallecidos a once, entre ellos personas que resultaron ahogadas en las crecidas de ríos o atrapadas en corrimientos de tierra y avalanchas de barro, según informaron los Gobiernos regionales de Oita y Fukuoka.