DOS DETENIDOS
Vilks stá en el punto de mira de la comunidad musulmana desde que en 2007 publicó una caricatura del profeta Mahoma con cara de perro. El ataque se convirtió en una pelea que fue creciendo en intensidad.
Una veintena de personas trataron de pegar al caricaturista y finalmente tuvieron que intervenir varios agentes de seguridad para impedirlo.
Lo único que recuerda Vilks es que le dieron un cabezazo, se cayó contra la pared y perdió sus gafas. La agresión se saldó con dos detenidos.
El dibujante asegura haber recibido amenazas de muerte a raíz de la publicación de la caricatura de Mahoma.