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África se divide por Níger: ¿qué países no apoyan a los golpistas?

En Níger no mejoran las tensiones, más bien al contrario. Allí los golpistas han vuelto a cerrar el espacio aéreo y han asegurado que una "potencia extranjera" está preparando una agresión contra el país.

La situación en Níger no está siendo nada fácil. El golpe de Estado realizado por soldados de la guardia presidencial ha provocado una inestabilidad en el Sahel que mantiene el África Occidental en tensión.

En estos momentos, los golpistas han vuelto a cerrar el tráfico aéreo. Además, dentro del continente africano hay posicionamientos al respecto y es por esto por lo que los golpistas han asegurado que una "potencia extranjera" está preparando una agresión, aunque no se han pronunciado sobre qué país en concreto.

África dividida: estos son los países a favor y en contra

La represión que allí se vive ha hecho que los países africanos tomen posiciones. Dentro del mismo continente tenemos variedad de posturas respecto al apoyo o al rechazo hacia los golpistas:

  • A favor: Mali, Burkina Faso y Guinea son tres de los países que han manifestado su apoyo a los golpistas. Además, estos han advertido de que un ataque en Níger equivale a "declararles a ellos la guerra". Otro de los apoyos con el que cuentan los golpistas fuera de África es el de Rusia. En el país gobernado por Vladímir Putin se ha confirmado la presencia de mercenarios del conocido grupo Wagner.
  • En contra: Nigeria, Costa de Marfil o Senegal, por el contrario, han asegurado estar dispuestos a intervenir militarmente ante esta situación en el país.

Evacuación de españoles

Esta situación también provocó hace apenas unos días que el Gobierno de España se preparase para evacuar a los 70 españoles atrapados en Níger a causa del golpe de Estado. El ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, fue el encargado de ultimar la evacuación de los más de 70 ciudadanos españoles.

Además, nuestro país no es el único. Francia e Italia también se prepararon para evacuar a sus ciudadanos de Níger tras el golpe de Estado que ha puesto a los militares al mando del país africano.