SUS PADRES SE ARREPIENTEN DE QUE FUERA AL COLEGIO ESE DÍA
Dagmara Przybysz, una polaca de 16 años aspirante a fotógrafa, se ahorcó el pasado mayo en los baños de su escuela, por lo que se abrió una investigación. El lunes, durante la investigación han testificado su madre y su novio, y ambos han coincidido en que ella se había quejado en varias ocasiones de tener que escuchar comentarios racistas.
En la declaración, la madre de Dagmara, Ewelina, ha dicho que su hija, que era "una mujer muy hermosa", se mejoró cuando los niños, y la mayoría de sus amigos, incluido su novio, fueron a otra escuela."Dagmara me hablaba a menudo de sus problemas y se sentía herida cuando alguien le decía algo desagradable", ha explicado. De hecho, varios días antes del trágico desenlace, la joven sufrió insultos y la madre asegura que en varias ocasiones escuchó "estúpida polaca", incidentes que ella califica de acoso y no de racismo.
"Se sentía herida cuando alguien le decía algo desagradable"
Lewis Simpson, el novio de Dagmara, ha explicado que se conocieron en la escuela primaria y han estado quedando desde que tenían 14 años. Según el joven, su pareja tuvo que estar aguantando comentarios racistas y que le dijeran que volviera a su país, palabras que le hicieron daño, según recoge 'Metro'.
Según se ha escuchado en el tribunal, el día antes de morir, Dagmara tuvo que ser llevada al hospital porque se autolesionó después de que las chicas se rieran de ella en la clase de educación física. De camino al hospital, vieron a dos chicas con el uniforme del colegio y ella le pidió que las atropellase, pero él no le dio importancia. A la mañana siguiente, su sobrina le llamó de madrugada llorando y diciéndole que se había tomado unas pastillas.
El padre de Dagmara, Jedrzej, ha explicado durante su intervención quesu hija le dijo que tenía problemas en la escuela pero que "no los entendería", y que la envió a clase porque no parecía que hubiera tomado pastillas. "Mi esposa y yo seguíamos preguntándonos si deberíamos haber mantenido a Dagmara en casa ese día, pero no había ninguna señal física de que hubiera tomados pastillas, de lo contrario la habríamos llevado al hospital", ha agregado.