La acusada por el asesinato de Lola, la niña que apareció muerta en un baúl, asegura que todo fue un sueño

Francia sigue conmocionada. El pasado viernes, una menor de tan solo 12 años desaparecía tras volver del colegio y, tan solo horas más tarde, era hallada sin vida en el interior de un baúl. Su cuerpo presentaba numerosos signos de violencia y la Policía francesa iniciaba una investigación para dar con el paradero del asesino.

Esa misma noche, las autoridades galas detenían a varias personas por su posible implicación en la muerte de la niña, no descartando que se tratase de un caso de tráfico de órganos. Sin embargo, todas las miradas se centraban en una ciudadana de 24 años con trastornos mentales que llevaba varios años en el país de manera irregular.

Días más tarde, la acusada del asesinato de Lola, durante el juicio, ha declarado que la violó y torturó antes de acabar con su vida, aunque poco más tarde, durante la misma declaración, ha asegurado que todo se trataba de un sueño.

Dabia ha relatado durante la primera parte de su declaración el proceso que llevó a cabo para acabar con la niña, cuyos padres habían denunciado su desaparición la misma tarde del viernes. Al parecer, ha reconocido que, tras raptarla, abusó sexualmente de ella y después la asfixió tapándole la cara con un objeto.

En ese momento, según ha confesado, se tomó un café mientras escuchaba música para, más tarde, descuartizar su cadáver y beberse su sangre.

Sin embargo, minutos después de la dura confesión, la acusada ha negado los hechos y ha puesto sobre la mesa que todo lo ocurrido se trataba de un sueño.

Le Pen carga contra la inmigración irregular

Nada más conocer la identidad de la agresora, la líder de la ultraderecha francesa, Marine Le Pen, ha cargado contra la política de inmigración del Gobierno de Enmanuel Macron para condenar los hechos.

"Una vez más, la sospechosa de este acto bárbaro no debería haber estado en nuestro territorio, y lo estaba desde hace más de 3 años", ha asegurado en la Asamblea Francesa.