PROCEDIMIENTO DE SEGURIDAD "NORMAL"
La Policía danesa levantó el cordón de seguridad establecido esta mañana en torno al centro cultural de Copenhague, que fue objeto de un atentado el pasado sábado, por una carta sospechosa tras comprobar que era una falsa alarma. "La investigación ha terminado, no había ningún explosivo, se ha levantado el cordón", informó la Policía en un comunicado.
Personal del grupo de artificieros había sido enviado a la zona, pero al comprobar que no había peligro, un agente recogió la carta que estaba en el suelo delante del centro cultural Krudttønden, según se puede ver en las imágenes. La Policía ya había avisado cuando comenzó el operativo que se trataba de un procedimiento de seguridad "normal" en estos casos.
Según medios digitales daneses fue el personal del centro el que dio la alarma a los agentes que custodian la zona desde el atentado porque la misiva contenía supuestamente mensajes vinculados con los atentados del fin de semana. Krudttønden acogía el sábado un debate sobre blasfemia y libertad de expresión al que asistía el artista sueco Lars Vilks, amenazado por islamistas tras dibujar hace años a Mahoma como un perro y presunto objetivo de un danés de 22 años, que disparó decenas de tiros con un arma automática contra el lugar.
En el tiroteo murió un cineasta danés de 55 años y tres agentes resultaron heridos de levedad. El supuesto tirador, identificado por los medios como Omar Abdel Hamid El Hussein, mató horas después de un disparo a un joven judío danés e hirió a dos policías que vigilaban una sinagoga. El Hussein murió tiroteado cuatro horas más tarde por la policía junto a la estación de Nørrebro, en el norte de la ciudad, tras responder con disparos a las llamadas al alto.