Portugal
La Policía de Portugal ha detenido a cuatro personas acusadas de delitos de esclavitud, trata de seres humanos y falsificación.
La Policía de Portugal ha detenido a cuatro personas acusadas de esclavizar durante 17 años a un hombre de 54 años en la región septentrional de Braganza (Portugal).
Las autoridades policiales han informado en un comunicado que la víctima vivía en una furgoneta clandestinamente, donde sufrió malos tratos físicos y psicológicos, además de explotación laboral. El hombre era "alquilado" a terceros para realizar trabajos agrícolas y era vigilado las 24 horas, que tenían en su poder todos sus documentos personales.
Los detenidos, de entre 37 y 44 años, serán investigados como sospechosos de delitos de esclavitud, trata de seres humanos y falsificación.
"Vivía en una situación degradante, pernoctando en una furgoneta, (...) sin las mínimas condiciones de vida, salubridad, higiene y alimentación", ha explicado el escrito de la Policía, exponiendo que "los acusados nunca le permitieron recibir atención médica, ni siquiera cuando sufrió un grave accidente".
La situación que la víctima sufrió durante los 17 años, le ha provocado lesiones irreparables que afectan gravemente a su movilidad.
Este pasado 16 de abril, la Policía de Málaga ha detenido a dos personas por secuestrar a un turista sueco que llegó hace un mes al aeropuerto de la ciudad. La víctima estuvo retenida durante 23 días con grilletes y con un dispositivo en el zapato con el que los arrestados controlaban su ubicación.
Los delincuentes exigían por el rescate el pago de 500.000 euros en criptomonedas, motivo por el que los familiares denunciaron los hechos a las autoridades policiales. Tras cinco días de negociaciones, se estableció un dispositivo de pago entre uno de los familiares de la víctima y la organización criminal con el objetivo de liberar al secuestrado, ha explicado la Policía Nacional en un comunicado.
La persona secuestrada durante 23 días viajaba a España desde Turquía junto con un amigo para conocer el país. En el aeropuerto de Málaga fue recogido por una tercera persona que presuntamente había sido enviada por su amigo para recogerle y llevarle al hotel donde se hospedaba, momento donde se produjo el secuestro.
La Policía Nacional planeó un dispositivo de rescate con uno de los familiares que se desplazó hasta Málaga para liberar a la víctima. S estableció un amplio dispositivo de vigilancia en el restaurante en el que habían se habían citado el familiar del secuestrado y los delincuentes.
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