Lotería de Navidad 2022
Nuestro cerebro realiza una acción algo inusual en caso de que ganemos la Lotería de Navidad. Explicamos qué nos ocurriría y cómo debemos actuar a continuación.
El gol de Andrés Iniesta en la final del Mundial de fútbol. Ver a Fernando Alonso ganar un Mundial de Fórmula 1, quizá el tercero. Chanel quedando tercera en Eurovisión. El día en que nos casemos. Que nos toque el Gordo de la Lotería de Navidad 2022. Ante situaciones como esta, nuestro cerebro tiende a explotar de felicidad, trayendo consigo una reacción de lo más adversa a lo que suele ser habitual en nuestra manera de sentirnos emocionalmente.
Si ganamos el Gordo del Sorteo Extraordinario de Navidad de 2022 de la Lotería Nacional, nuestro cerebro experimentará una reacción inusual, nublando nuestro juicio como si creyéramos que somos los seres más poderosos de la Tierra. Nada más lejos de la realidad, por lo que debemos ser cautelosos. Una vez hayan pasado unos minutos, debemos relajarnos y entrar en razón, dado que este premio puede llegar a ser nuestro calvario si no actuamos con cabeza a la hora de emplearlo como debidamente debemos.
Una vez nuestra felicidad se haya rebajado y hayamos pasado a estar más tranquilos, debemos pensar con cabeza: ¿nos conviene actuar como estamos haciendo? Ante todo, hay que tener en cuenta dos factores: el primero pasa por saber que ese dinero ganado en el sorteo de la Lotería de Navidad va a ser útil en nuestra vida, y el segundo, por meditar si queremos que todo el mundo sepa que nos hemos hecho millonarios, o solamente contarlo en nuestro círculo más íntimo y evitar que se nos acerque gente interesada.
El peligro de pregonarlo a los cuatro vientos
Como hemos comentado, debemos ser cautelosos y pensar calmadamente a quién se lo contamos. Si actuamos con la emoción y lo pregonamos a los cuatro vientos, corremos el riesgo de que la noticia se propague y venga gente interesada para acercarse a nosotros y tratar de sacar rédito. Y no solo algunas personas; también posibles empresas tratarán de buscar alguna manera de engatusarnos para invertir nuestro dinero de algún modo que a ellos les beneficie.
Por ese motivo, debemos tener en cuenta que nuestro cerebro es un arma de doble filo; mientras puede darnos un inmenso éxtasis de felicidad, también puede llegar a provocarnos serios problemas si no tenemos la cabeza en su sitio. Por ese motivo, hemos de tener en cuenta que debemos ser prudentes. La Lotería de Navidad llega, pero se va en cuanto la gastamos, por lo que la prudencia debe ser una de nuestras máximas en estas situaciones.