Coronavirus

El furor por las piscinas hinchables se desata durante la desescalada por coronavirus

Con el plan de desescalada, la llegada del buen tiempo, y la incertidumbre por la pandemia de coronavirus, se ha desatado la compra de piscinas para instalar en terrazas o jardines.

El furor por las piscinas hinchables, prefabricadas e incluso de obra se desata durante el plan de desescalada por coronavirus. Si al comienzo del confinamiento, la obsesión era comprar 'papel higiénico', luego la levadura para hacer repostería, y más tarde la bicicleta para hacer deporte, ahora tenemos la mirada puesta en cómo vamos a poder refrescarnos este verano.

El panorama, a es tas alturas, es incierto en cuánto a cómo será el baño en playas y piscinas públicas. Entre el aforo limitado, el distanciamiento social y las medidas higiénicas, hay quien ya piensa en pasar las vacaciones sin moverse de casa pero sin renunciar a un chapuzón.

Hay lista de espera

Por eso, estos últimos días, las ventas se han disparado un 350 %. Hay dos meses de lista de espera para algunos modelos, y otros, directamente, ya se han agotado. Venta online o en supermercados, la demanda es impresionante.

Empresas especializadas en instalación de piscinas de obra aseguran que mayo siempre ha sido un mes muy intenso de trabajo pero este año están sin parar. La gente quiere piscina en casa, el que puede y tiene parcela, intenta construirse una antes de que lleguen las vacaciones.

También piden de hormigón, desmontable, o pequeñas hinchables para colocar en terrazas. Éstas últimas se pueden comprar por unos 40 euros dependiendo del modelo, resistencia y materiales.

Poca probabilidad de contagio en el agua

El Consejo Superior de Investigaciones Científicas, CSIC, aseguró en un informe que ve "muy poco probable" el contagio de coronavirus por contacto con agua en piscinas o playas. Aún así, son muchos los que prefieren piscina en casa para proteger a sus familias y dejar el veraneo para el año que viene.

Más sobre este tema: