Crisis en el PP
Pablo Casado, sin haber anunciado su dimisión tras la crisis en el PP, ya se ha despedido del arco parlamentario y así ha abandonado el hemiciclo.
La crisis en el Partido Popular (PP) cumple esta noche una semana frenética que todo apunta finalizará con la etapa de Pablo Casado como presidente del partido. El hasta el momento líder de la oposición ha protagonizado el último cara a cara con Pedro Sánchez en el Congreso de los Diputados y el tono ha sido de despedida.
Tras recibir un aplauso en pie de sus parlamentarios y después de manifestar que la política es la "defensa de los más nobles principios y valores, el respeto a los adversarios y la entrega a los compañeros", Casado ha abandonado el hemiciclo solamente acompañado por Pablo Montesinos y María Pelayo.
Aunque por el momento el presidente del partido todavía no ha anunciado su dimisión, Casado se reunirá esta tarde con los presidentes autonómicos del partido, tras convocar el XX Congreso del Partido Popular, extraordinario del que se cree saldrá el nuevo presidente de la formación tras 7 días de guerra abierta entre Génova y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Casado ha acudido al Pleno "por obligación como jefe de la oposición y respeto a la sede de la soberanía nacional". Para estar "a la altura de las circunstancias, aunque el contexto sea difícil", según ha explicado Montesinos.
Casado no ha usado su réplica a Sánchez y tras escuchar la respuesta del presidente del Gobierno ha abandonado el hemiciclo. Tras él han dejado también sus escaños Ana Beltrán, Pablo Montesinos y Antonio González Terol, quedando en la bancada Cuca Gamarra y Guillermo Mariscal.
7 días frenéticos
A esta situación se ha llegado tras una semana de infarto que comenzaba el pasado miércoles por la noche con la publicación de una supuesta trama de espionaje contra Ayuso y su familia por el presunto cobro de comisiones ilegales.
Esta mecha prendió la llama reabriendo de forma cruenta la guerra que Génova y Sol han manifestado en ocasiones anteriores. El jueves, José Luis Martínez-Almeida negó cualquier responsabilidad del Ayuntamiento en las acusaciones. Posteriormente, Ayuso compareció rechazando las informaciones sobre las comisiones que presuntamente habría cobrado su hermano y denunciando la campaña de Génova. A continuación tomó la palabra Teodoro García-Egea para abrir un expediente informativo a la presidenta madrileña.
El viernes Pablo Casado pidió a Ayuso que demostrase que no había irregularidades y la mandataria contestó con un comunicado en el que asegura que no se cobraron comisiones pero sí más de 55.000 euros por traer mascarillas de China. Los barones piden al unísono a Casado que pare la guerra.
El sábado se filtra una reunión en Génova de Casado y Ayuso y se cierra el expediente contra ella. El domingo una manifestación en Génova se pronuncia contra la directiva nacional y en apoyo de Ayuso.
El lunes tuvo lugar una reunión del núcleo duro de Casado que acabó por convocar la Junta de la Directiva Nacional. Alberto Núñez Feijóo, al que ya todo el mundo ve como el sucesor, sin pedirlo pidió la dimisión de Casado.
El martes una cascada de dimisiones dentro del PP protagonizó la jornada, Egea dejó su cargo como secretario general, Almeida abandonó la portavocía y mientras la fiscalía ha abierto una investigación por el contrato.