SÁNCHEZ INICIA LOS CONTACTOS
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el lehendakari, Iñigo Urkullu, han pactado crear dos comisiones bilaterales, una para acercar presos etarras a cárceles vascas -aunque no a corto plazo- y otra para el traspaso de las 37 competencias pendientes en el Estatuto de Gernika.
Con el encuentro que ambos han mantenido en La Moncloa, durante casi dos horas, Urkullu ha dado por abierta la puerta a un "diálogo institucional permanente" con el Gobierno de España y a una nueva relación de "confianza y lealtad", tras el distanciamiento de los últimos dos años con el anterior presidente, Mariano Rajoy.
En rueda de prensa, Urkullu ha defendido que este es el momento de "avanzar en la normalidad" de la política penitenciaria si bien ha dicho entender las "cautelas" de Sánchez en relación a las víctimas del terrorismo. En ese sentido, le ha trasladado que todo lo que se haga será "desde el respeto a las víctimas" y le ha recordado que las iniciativas que se desarrollan desde el Gobierno vasco desde hace años tienen en cuenta "la memoria, el reconocimiento y reparación a las víctimas".
No obstante, ha admitido que no se ha fijado un calendario ni un horizonte para la modificación de esta política dirigida "a superar las medidas de excepcionalidad, evitar el desarraigo social de las personas penadas y facilitar su reinserción". Por su parte, fuentes del Gobierno han elogiado la agenda "muy práctica" con la que Urkullu se ha presentado en la reunión y han asegurado que la conversación con el presidente Sánchez ha sido "muy franca" y que los dos han coincidido en la necesidad de rebajar el actual nivel de conflictividad.
El propio Sánchez ha subrayado su "buena sintonía" con Urkullu: "Buena sintonía durante este primer encuentro y voluntad para trabajar juntos por la convivencia en nuestro país" ha escrito el presidente en su cuenta de Twitter. En la reunión, con la que Sánchez ha iniciado su ronda de entrevistas con los presidentes autonómicos, también se ha planteado la necesidad de hacer una reflexión sobre el actual modelo de Estado desde la asunción de "una realidad plurinacional y la existencia de hechos diferenciales que demandan un tratamiento propio y singular".
"No hemos hablado de ruptura sino de convivencia desde el respeto mutuo" ha subrayado Urkullu, que ha trasladado a Sánchez la posibilidad de explorar, de cara a la conmemoración en 2019 del 40 aniversario de la Carta Magna, la vía de una "convención constitucional" que permita interpretar el espíritu originario del pacto que supuso la Constitución.
En el corto plazo, Urkullu ha informado de que se abordarán los dos traspasos de ferrocarriles que dan cumplimiento a una sentencia firme del Tribunal Constitucional. Y ha anunciado que se convocará la Comisión Mixta de Transferencias el próximo mes de julio para materializar estos traspasos de las líneas Bilbao-Basauri y Alonsotegi-Barakaldo.
Además, se convocará un encuentro de trabajo de los equipos jurídicos de ambos gobiernos para analizar y encauzar los recursos pendientes ante el Tribunal Constitucional.
Otro de los puntos abordados ha sido la reactivación económica y aquí Urkullu ha apelado a seguir haciendo esfuerzos para generar más empleo y de mayor calidad con un impulso a las políticas activas, especialmente en el colectivo juvenil y los parados de larga duración. Además, ha hecho una apuesta por la investigación como palanca para transformar el actual modelo de desarrollo económico.
Finalmente y sobre la visión de Europa, tanto Sánchez como Urkullu han coincido en la necesidad de una política europea común que dé respuesta tanto a las necesidades de las personas migrantes como a las personas refugiadas y solicitantes de asilo. Urkullu ha trasladado a Sánchez la disposición de Euskadi a compartir la acogida de las personas refugiadas y a desarrollar nuevas iniciativas y ha puesto el acento en promover vías como los corredores humanitarios o impulsar el modelo de patrocinio comunitario.