SEGÚN RELATA SU FAMILIA
Familiares del piloto fallecido en el accidente de un eurofighter en Los Llanos (Albacete) creen que el piloto no saltó del aparato, probablemente, para evitar una desgracia mayor, ya que el caza podría haberse dirigido hacia una zona con casas o población. El capitán Borja Aybar fallecido en su avión de combate cuando intentaba tomar tierra en la base aérea de Los Llanos (Albacete), tras participar en Madrid en el Día de la Hispanidad, en el que fuerzas de todos los ejércitos desfilan a lo largo de la Avenida de la Castellana, ante decenas de miles de personas.
El capital de la 61 promoción del Ejercito del Aire era natural de Puertollano (Ciudad Real), tenía 34 años y era padre de un hijo de pocos meses. Borja Aybar vivió en Puertollano hasta los 12 años, hasta que sus padres, por motivos laborales, tuvieron que marcharse a vivir a Santa Pola (Alicante), donde siguen residiendo, mientras que él residía actualmente en Sevilla.
Así lo ha relatado una prima del capitán malogrado, quien ha explicado que, ya desde pequeño, Borja "siempre tuvo una gran ilusión por volar" y, con ese propósito, ingresó en el Ejército a los 18 años "hasta convertirse en un experto piloto".
La misma familia ha considerado que, si no ha activado el mando para saltar del avión, ha sido para evitar una desgracia mayor y desviar la caída del aparato en la misma base de Los Llanos donde le esperaba mucha gente, incluida su mujer e hijo.
El siniestro ha ocurrido a las 12:09 horas cerca de la citada base aérea de Los Llanos (Albacete), donde tenía su base el avión Eurofighter en el que el capitán regresaba de Madrid, tras participar en los actos organizados con motivo de la Fiesta Nacional.