en plena campaña electoral
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha citado a declarar como investigado por el caso de los lazos al presidente de la Generalitat, Quim Torra, el próximo 15 de mayo, en plena campaña electoral, una fecha que éste ha elegido de entre varias que se le habían propuesto de mayo y junio.
El magistrado del TSJC Carlos Ramos ha firmado este lunes la providencia que fija la fecha para la declaración de Torra, a raíz de la querella que le presentó la Fiscalía por desoír la orden de la Junta Electoral Central de retirar los lazos amarillos de los edificios públicos.
La fecha señalada ha sido elegida por la Oficina de la Presidencia del Govern de entre varios días de los meses de mayo y junio que el alto tribunal catalán le había propuesto, atendiendo a las exigencias de la agenda de Torra, por su condición de presidente de la Generalitat.
El día fijado para el interrogatorio de Torra coincide con la sexta jornada de la campaña de las elecciones municipales y europeas del próximo 26 de mayo, pese a que, en los últimos años, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ha evitado fijar declaraciones de políticos imputados en período preelectoral.
La querella que investiga el TSJC, interpuesta por el fiscal superior de Cataluña, Francisco Bañeres, acusa a Torra de desatender "reiteradamente" las órdenes de la Junta cuando mantuvo simbología "partidista" en edificios públicos, lo que en su opinión reviste "especial gravedad en cuanto incide directamente en el derecho de participación política de la totalidad de la ciudadanía".
La Fiscalía añade en su querella que el presidente catalán desoyó "consciente y deliberadamente" el requerimiento "claro y expreso" emitido por la Junta Electoral y mantuvo los elementos que la Junta le pedía retirar, "aunque fuera de manera encubierta y simbólica".
Tras recibir el ultimátum de la Junta, el pasado 18 de marzo, Torra anunció que seguiría las recomendaciones del Síndic de Greuges sobre el asunto y, tres días después, sustituyó la pancarta a favor de los políticos presos del Palau de la Generalitat por otra con el mismo mensaje, pero con un lazo blanco con una franja roja, en vez de amarilla.
Ello motivó una nueva resolución de la Junta Electoral, que acordó llevar el caso a la Fiscalía, ordenar a los Mossos d'Esquadra retirar los símbolos de apoyo a los políticos presos y abrir un expediente sancionador al presidente catalán.