ERA MÁS CONOCIDO COMO EL 'TRIBUNAL DE LA FAMILIA'
El Tribunal de Cuentas dice que todos los trabajadores han aprobado una oposición, pero los datos son contundentes: de 700 trabajadores que tiene el Tribunal de Cuentas, cien tienen parentesco familiar con altos cargos de la Institución.
Del escándalo no se escapa nadie, ni su presidente Ramón Álvarez de Miranda, que tiene en la plantilla a dos: su concuñada y a su sobrino.
Su vicepresidente tiene a cuatro: dos hermanos, su esposa y una prima. Ambos se justifican diciendo que sus familiares ya trabajaban en el organismo antes de llegar ellos.
También está implicado el presidente del comité de empresa de UGT. Tiene colocados a seis familiares: su exesposa, su pareja actual, su nuera, su cuñada y dos sobrinos.
Y su antecesor en el cargo, también de UGT, metió en la plantilla a nueve familiares. Los trabajadores no han querido hacer declaraciones, pero tampoco les ha pillado de sorpresa la noticia.
Fuera de micrófono cuentan que el presunto "enchufismo" es tan viejo que al Tribunal de Cuentas le llaman el Tribunal de la familia.
Se trata uno de los organismos públicos que paga mejores sueldos: una media de 3000 euros al mes. Y es el encargado de controlar las cuentas de todas las administraciones.