la empresa de la furgoneta exigió el pago con tarjeta
Antena 3 Noticias continúa desgranando el sumario de los atentados del 17 de agosto en Barcelona y Cambrils. En este caso, se han desvelado las facturas del alquiler de la furgoneta con la que los terroristas arrollaron a una multitud en Las Ramblas. Costó apenas 277 euros, más una fianza de 150; es lo que se ha venido a denominar terrorismo 'low cost'.
Mohamed Hichamy alquiló una furgoneta el 16 de agosto a las 11:20 de la mañana y Driss Oukabir alquiló una segunda a las 17.30 horas. Las dos al mismo precio y con un mismo fin, usarlas para causar una masacre. Insistieron en pagar en metálico para no dejar rastro, pero la empresa les exigía el pago con tarjeta.
Fue Younes Abouyaaqoub quien llevó una de esas furgonetas hasta Las Ramblas donde atropelló a una multitud. Después, huyó hasta llegar a los alrededores del Camp Nou y es ahí donde se le pierde la pista. Antes, se encontraría con el joven Pau Pérez, a quien asesinó y robó su coche para emprender su huida.
En su carrera a contrareloj por huir, embiste con el coche a unos mossos en la avenida Diagonal. La mosso atropellada cuenta que Abouyaaqoub se reía mientras les atropellaba.
Se le perdió la pista durante cuatro días y ahora se ha sabido que estuvo en distintas gasolineras. Incluso llegó a buscar comida en la basura para poder alimentarse.
Gracias a la información de varios vecinos, su huida acabó el 21 de agosto en Subirats, donde fue abatido por la Policía.
Desde entonces, Mohamed Houli es el terrorista que más datos ha proporcionado al juez sobre los planes de la célula yihadista en Cataluña. Se salvó de la explosión de Alcanar porque estaba en la terraza del chalet y desde la cárcel ha confesado lo que planeaban: "El objetivo principal de nuestro grupo era la Sagrada Familia. No nos dijeron la forma de hacerlo. Creo que esperaban al último momento para indicarnos la forma, el día y la hora".