Temor en la valla de Melilla, donde se espera la llegada de hasta 5.000 inmigrantes

La Guardia Civil se reorganiza ante lo que se prevé como la mayor llegada de inmigrantes en años a la valla de Melilla. Según los servicios de seguridad, hasta 5.000 inmigrantes podrían llegar a la valla en cuestión de horas o pocos días, lo cual ha puesto en alerta máxima a las autoridades, preocupadas por la posibilidad de que haya un asalto masivo, y la posibilidad de que ocurra una tragedia similar a la que hubo el pasado mes de junio.

Los agentes, que ya han denunciado en múltiples ocasiones los pocos instrumentos con los que cuentan para defenderse, valoran cómo afrontar esta compleja situación, la cual puede traer consigo imprevisibles consecuencias. Recientemente, el Gobierno de España había concedido un nuevo paquete de ayuda a Marruecos para combatir la inmigración ilegal, el cual estaba dotado con una cantidad aproximada de 30 millones de euros.

Aunque no se sabe a ciencia cierta si todos ellos podrían intentar saltar, los equipos de seguridad ya se preparan, con la intención de estar prevenidos por lo que pueda pasar. La polémica está servida, tras el asalto masivo que hubo en mayo de 2021, y las trágicas muertes que tuvieron lugar el pasado mes de junio, donde hubo numerosas críticas cruzadas, que fueron dirigidas muy especialmente a las autoridades marroquíes por su fuerza contra los migrantes.

Las posiciones de los partidos políticos sobre la inmigración ilegal

Unidas Podemos es el partido que más favorable se posiciona a favor de la inmigración ilegal, señalando que "nadie es ilegal" y pidiendo que se regularice la situación de quienes lleguen a España. El PSOE también sigue en la misma línea, aunque lo hace de una forma más suave, tratando de evitar la defensa en todos los casos posibles. Ambos partidos políticos, socios del Gobierno de España en coalición, han tenido ya fuertes discrepancias sobre este asunto.

Por su parte, Ciudadanos defiende la inmigración legal, aunque no se opone rotundamente a la inmigración ilegal en todos los casos. El Partido Popular defiende "una inmigración legal, ordenada y vinculada al empleo, acabando con las regularizaciones masivas", en contraposición con la izquierda. Por su parte, Vox se opone rotundamente a toda la inmigración ilegal y pide devolver a sus países de origen a quienes no estén regularizados legalmente.