DEBATE EN FERRAZ ENTRE LOS CANDIDATOS A LAS PRIMARIAS DEL PSOE
Desde la misma foto de familia del debate que se ha celebrado en Ferraz, quedó plasmado que los candidatos a las primarias del PSOE llegaban dispuestos a una batalla. En esa primera imagen, Patxi López se situó entre Susana Díaz y Pedro Sánchez, los dos rivales que más dardos se han lanzado en su búsqueda de los votos de los militantes. Ya antes otros gestos habían llamado la atención: los del presidente de la gestora, Javier Fernández, en sus saludos. De la frialdad con Sánchez a la complicidad con Díaz y a la fraternidad con López. Sánchez había sido el primero en llegar, alrededor de las 11:10 horas, y su posado durante un minuto se le hizo eterno.
La presidenta de la Junta de Andalucía fue la encargada de abrir el debate con los mensajes de presentación. Díaz se ha presentado como el "rumbo" cierto para su partido; ha sostenido que ella es la que "conviene" al PSOE porque le "gana" al PP en las elecciones, mientras que Pedro Sánchez ha protagonizado "las dos derrotas más grandes de la historia" del partido. Por su parte, Sánchez ha arremetido contra la abstención ante el PP y la investidura de Mariano Rajoy. Y el tercer aspirante en liza, Patxi López, ha reivindicado para sí mismo en la votación del próximo domingo como "el voto útil".
Los rifirrafes más intensos se han vivido entre los dos candidatos que parten con más opciones de triunfo. Sánchez ha centrado su ataque contra Díaz en la abstención a la investidura de Mariano Rajoy y ha defendido que en estas primarias se decide si se "cronifica". Por su parte, Díaz ha respondido reprochándole que los socialistas están en la actual situación porque, pese a enfrentarse a un "PP tóxico", Sánchez obtuvo el mayor desastre electoral.
En el primer tramo del debate, la abstención y el "desastre electoral" han protagonizado los cruces de declaraciones entre Sánchez y Díaz, mientras que Patxi López ha insistido en que hay que hablar del futuro y no tanto del pasado. La presidenta de la Junta ha reconocido que la decisión de abstenerse ante Mariano Rajoy fue "difícil y dolorosa" pero ha defendido que no había otra alternativa porque el PSOE tiene 84 escaños.
Además, Díaz ha cargado contra Sánchez por sus "vaivenes" y sus cambios de opinión en función de lo que le viene bien. Y, para ilustrarlo, ha hablado de sus cambios en su propuesta territorial o en sus relaciones con Podemos. Sánchez ha respondido a esta acusación, que López ha completado recordando que últimamente ha defendido buscar "una alianza" con Podemos, defendiendo que no es presidente del Gobierno porque Pablo Iglesias no aceptó las condiciones de los socialistas.
Además, el exsecretario general del PSOE ha reprochado a Díaz que desde el principio de su mandato ella y otros barones "cuestionaran" su liderazgo. "No se puede cuestionar diariamente al secretario general. Si se hace, debilitamos a nuestra organización y damos armas a la derecha mediática y política", le ha dicho. Tras situar dicho cuestionamiento en diciembre de 2014, tres meses después de comenzar su mandato, Sánchez ha garantizado que el próximo domingo por su parte "habrá unidad, desde la generosidad y habrá lealtad al resultado". "Espero lo mismo también por parte de los otros candidatos", ha emplazado a sus rivales.
Díaz y Sánchez se enzarzan a cuenta del modelo territorial
Díaz ha acusado a Sánchez de tener una visión de España para cada día de la semana e incluso 19, una por cada comunidad y ciudad autónoma, mientras que el ex líder ha dicho de ella que no respeta la realidad plurinacional. Díaz ha considerado que el PSOE perdió las elecciones pasadas porque Sánchez dio "muchos bandazos" y los ciudadanos no sabían qué estaban defendiendo en cuando a sistema territorial. "Has entrado y salido de la declaración de Granada, Pedro", ha señalado Díaz, que en la mayor parte de su intervención se ha dirigido directamente a Sánchez, a quien ha reprochado que cambie de opinión en función de lo que le "viene bien", hasta el punto, a su juicio, de que tiene una visión de España para cada día de la semana o incluso una para cada comunidad y ciudad autónoma.
Sánchez ha contraatacado recordando distintas actuaciones y frases de Díaz, como cuando en 2006 votó a favor del Estatut o cuando dijo en 2014 que la soberanía es indivisible pero se puede negociar el término nación. Del mismo modo, ha dicho que ni el vasco ni el catalán ni el gallego "son acentos", sino idiomas, y ha invitado a Díaz a reconocer la realidad plurilingüe del país. Para el ex líder socialista, "hay una única soberanía, hay un único Estado, el estado español", pero es necesario "reforzar y reconocer una mayor pluralidad". También ha señalado que él defiende "la España nación de naciones" que defendían Felipe González o José Luis Rodríguez Zapatero.
López, por su parte, ha enfatizado que para los socialistas "un país, antes que una nomenclatura es un pacto entre ciudadanos libres e iguales". En la Declaración de Granada, los socialistas consensuaron en 2013 un modelo territorial del Estado mediante un proceso de federalización.
Díaz a Sánchez: "Tu problema no soy yo, eres tú"
"Tu problema no soy yo, eres tú", le ha espetado la presidenta andaluza a Sánchez, a quien le ha reprochado que trate de "justificarse" en sus diferencias con ella. "Si tu problema fuese yo, el problema habría acabado hace mucho tiempo", ha asegurado, y ha agregado: "El problema es que de la Ejecutiva sólo quedan siete trabajando contigo; José Luis Rodríguez Zapatero ya no se fía de ti; Felipe González también piensa que lo has engañado". Por ello, ha insistido en que el problema no es ella: "El problema eres tú y cuando la gente no se fía de ti, deberías hacértelo ver", le ha espetado después de que Pedro Sánchez le reprochara que le "cuestionara diariamente" durante su etapa como secretario general del PSOE.
Otro de los grandes reprocges que Díaz le ha hecho a Sánchez ha sido la inclusión de Irene Lozano, ex diputada de UPyD, en las lista del Congreso por Madrid en las elecciones de diciembre de 2015 y ha asegurado que esta decisión fue "dolorosa" para el partido. "¿No había en Madrid ninguna candidata con mérito y capacidad para ir en la lista en lugar de Lozano?", le ha preguntado, y ha añadido que muchos en el partido se sintieron "dolidos" por "premiar, a quien nos había insultado, con un escaño en el Congreso de los Diputados". La candidata ha apostillado que no quiere que en el PSOE las mujeres sean "intercambiables" y que "unas se sustituyan por otras en función del líder".