CNI
Los populares exigen al Gobierno más detalles por la investigación abierta contra dos agentes del Centro Nacional de Inteligencia mientras los socios de Moncloa piden responsabilidades a Estados Unidos, el supuesto país al que los sospechosos habrían filtrado información confidencial.
La investigación abierta contra dos agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) por la supuesta filtración de información a Estados Unidos ha provocado la reacción inmediata de todos los partidos políticos. "Estamos ante unos hechos de suma gravedad", ha insistido el portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, que ha cargado contra el presidente del Gobierno por "comprometer la seguridad de nuestro país" y no prestar atención a esta crisis diplomática: "No hay nadie al timón". Los 'populares' piden explicaciones y detalles de una investigación judicial que está abierta.
Fuentes cercanas al caso han confirmado a Antena 3 Noticias que los dos sospechosos fueron detenidos a finales de septiembre. Uno de ellos sigue en la cárcel; el segundo, está en libertad con cargos.
Para Sumar, el principal responsable es Estados Unidos, de ahí su exigencia de más información. Podemos incluso ha pedido la comparecencia de la directora del CNI, Esperanza Casteleiro: "Siempre es grave que un aliado te espíe pero resulta más grave que compre a agentes de seguridad de tu país para que pasen información", ha asegurado el diputado Javier Sánchez Serna. En este sentido, deja la puerta abierta a que el Gobierno se ponga en contacto con la embajadora de Estados Unidos en España.
Fue una investigación interna la que hizo saltar todas las alarmas. El propio CNI detectó que dos de sus agentes habrían sustraído información clasificada como confidencial. Tras ponerlo en conocimiento de la Fiscalía, la Policía detuvo a ambos sospechosos. Desde entonces las diligencias judiciales son secretas.
No hay detalles del tipo de información que habrían vendido, tampoco del tiempo que la brecha estuvo abierta en el Centro Nacional de Inteligencia; lo único que confirma Moncloa es que su relación con Estados Unidos es excelente. Una particular crisis a la que el Gobierno trata de quitar importancia para evitar más consecuencias diplomáticas.