Negociaciones investidura
Después de finalizar la ronda de consultas de Felipe VI, las negociaciones para una nueva investidura siguen estancadas en el mismo punto.
Han pasado más de dos meses desde las elecciones generales del 23J y los resultados, de momento, no arrojan luz para la conformación de un nuevo Gobierno. Tras la investidura fallida del candidato del PP, Alberto Núñez Feijóo, ahora el centro de atención se acentúa -aún más- en Pedro Sánchez y los pactos con las formaciones que tienen la llave para sacar adelante su investidura.
La negociación con las formaciones independentistas tiene un camino marcado desde hace semanas, la amnistía se da por hecha desde ERC y Junts y ahora el precio sube hasta una pretensión de autodeterminación.
Lo que sorprende más a estas alturas es el giro en el discurso de Sumar, cuyo apoyo parecía garantizado -de hecho desde la formación de Yolanda Díaz han mostrado siempre 'optimismo' en las negociaciones y dan por hecho la conformación del Gobierno-, aunque esta semana se han distanciado de dar su voto a favor a los socialistas.
"Estamos trabajando para que el sentido del voto sea positivo, pero a día de hoy no lo es"
Este lunes, tanto Ernest Urtasun como la propia Yolanda Díaz marcaron distancia con el PSOE. Primero el portavoz de Sumar expresó que no daría un "cheque en blanco" al partido de Pedro Sánchez y, posteriormente, Yolanda Díaz, tras su encuentro con el rey, expresó su voluntad de conformar un gobierno de coalición, aunque añadió que aún estaban "lejos del acuerdo".
La misma posición que este martes ha manifestado en Espejo Público el propio Íñigo Errejón. "Estamos trabajando para que el sentido del voto sea positivo, pero a día de hoy no lo es", ha dicho el diputado del Sumar.
Desde el PSOE continúan expresando su "discreción" en las negociaciones. Este martes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la propia ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha insistido en esta línea añadiendo que la idea de su partido es "consolidar la gobernabilidad de España para los próximos cuatro años".
La cuenta atrás para la conformación de un nuevo Gobierno tiene fecha máxima desde el pasado miércoles. Desde el 27 de septiembre los partidos políticos disponen de dos meses para llegar a un acuerdo y evitar la vuelta a las urnas.
Desde el PSOE el único que ha abierto la puerta a una repetición electoral por el órdago independentista ha sido el líder del PSC, Salvador Illa. Por parte del independentismo catalán también se ha incrementado la presión al Gobierno con esta posibilidad. De hecho, desde Junts no se sienten aludidos respecto a esta idea y creen que unas nuevas elecciones serían "problema del PSOE".
En caso de darse esta situación, las elecciones generales se celebrarían a principios del próximo año, en mitad del mes de enero.