TRAS UNA BAJA DE OCHO SEMANAS
La senadora de Entesa Iolanda Pineda ha acudido a la sesión de control con su bebé de dos meses, para reclamar que la Cámara alta ponga en marcha cuanto antes el voto telemático para los representantes con baja maternal o enfermos, como ya ha decidido el Congreso.
Pineda, del PSC, ha entrado en el salón de plenos con su pequeño, Narcís, en brazos, y ha estado sentada unos minutos en su escaño. Después, en los pasillos del Senado ha explicado a los periodistas que se ha incorporado al trabajo tras ocho semanas, y el resto de la baja la tendrá su marido para cuidar del pequeño.
Iolanda Pineda ha querido hacer este gesto para reclamar que se haga efectivo cuanto antes el voto telemático en el Senado, del mismo modo que lo aprobó ayer el Congreso.
La Mesa del Congreso aprobó el procedimiento para el voto telemático, después de que el pasado mes de julio la Cámara modificara su Reglamento para permitir las votaciones de aquellos diputados que, bien por embarazo, permiso de maternidad o paternidad o enfermedad grave, no pudieran asistir al pleno.
Según este procedimiento, el presidente del Congreso deberá verificar, mediante una llamada telefónica, el sentido del voto que por vía telemática realicen los diputados ausentes que hayan sido autorizados previamente a participar en la votación por la Mesa de la Cámara baja.
En el caso del Senado, la Mesa de esta Cámara estudiará "sin ninguna prisa" la decisión acordada ayer por la del Congreso. El presidente de la Cámara alta, Pío García Escudero, ha explicado que el juego de mayorías permite analizar con tranquilidad la decisión del Congreso, ya que los grupos pueden optar en cualquier momento por un modelo de "cortesía parlamentaria" que ya se utiliza en los parlamentos autonómicos.
Un caso similar ocurrió hace pocos días en el Ayuntamiento de Burjassot, en Valencia. Sus 21 concejales se reunieron en el hospital donde ha dado a luz una compañera de la corporación. Todo fue porque el voto de la recién estrenada madre era clave para tomar una decisión que no podía esperar.