OLEADA DE VOLUNTARIOS EN LOS HOSPITALES CATALANES
Los atentados de este jueves en Cataluña han movilizado a toda la ciudadanía, tanto local como turista, que no solo ha gritado que "no tiene miedo" en los homenajes, sino que además se ha lanzado a ayudar en distintos ámbitos, como en el voluntariado en los principales hospitales que acogen a las víctimas de los atentados.
Decenas de personas se han ofrecido voluntarias para donar sangre para las transfusiones a los heridos y otras tantas se han ofrecido también como intérpretes para traducir en los centros hospitalarios las comunicaciones entre víctimas heridas y personal sanitario, debido al gran número de diferentes nacionalidades entre los afectados.
Pero la solidaridad no sólo se ha mostrado en las donaciones de sangre, las traducciones e incluso las personas que abrieron sus casas a desconocidos para que se resguardaran durante el atentado, sino que muchos profesionales de la sanidad ya jubilados, haciendo gala de su vocación y su solidaridad han vuelto a los hospitales como voluntarios para ayudar a las víctimas del doble atentado terrorista.
Este es el caso de Pepi Gamero y Nieves Cardenal, dos trabajadoras jubiladas del Hospital del Mar (el centro sanitario que atiende a la mayor parte de las víctimas del atentado) que están ayudando, como los voluntarios de la Cruz Roja, a los heridos y sus familiares con traducciones, ayuda psicológica e incluso acompañamiento y es que a ellas ni siquiera les importa echar muchas más horas de lo habitual en el voluntariado si es para ayudar en una situación como esta.