Investidura Pedro Sánchez
Los gestos de los interlocutores, sus actitudes y sus formas de hablar también han sido importantes a la hora de identificar las posturas de los candidatos en el debate de investidura.
"Pedro Sánchez me ha sorprendido. Estaba mucho más tranquilo de lo que es habitual. Comenzó más agresivo. Pero cuando terminaba una intervención. Con la mandíbula apretada. Eso es una excepción. No es relajación. Tensión que no es ni con Abascal ni con Casado. Es con Rufián", dice José Luis Martínez Ovejero, experto en lenguaje gestual.
"Casado ha sido impactante en sus intervenciones. Sobre todo porque su mirada hacía Sánchez ha sido directa. Le señalaba. Le miraba. Algo con lo que controlaba el dominio de las palabras. Del líder del PP sacamos una micro expresión de ira . Lo que más he visto en él durante su intervención ha sido ira y desprecio. Pero mucho más desprecio, que es algo que se asocia a superioridad", dice sobre el popular.
"Abascal me ha sorprendido mucho. Pese a tener un discurso muy impactante no miraba casi al Presidente del Gobierno. Miraba a los lados. Algo que te hace perder fuerza argumentativa. Por lo que. a pesar de tener argumentos potentes y usar ese dedo indice, que es muy agresivo. Realmente pierde fortaleza y seguridad al no mirar directamente a su objetivo", comenta sobre el líder de VOX.
"El de Iglesias es su discurso más relajado y tranquilo. Sus gestos son inexistentes. La mano sobre el atril y la otra en el bolsillo. Algo que en principio es imperdonable en un orador. Estaba tan tranquilo y relajado que parece que estuviera de trámite.", dice sobre el líder de Podemos.
Por último ha destacado lo ocurrido cuando el diputado de Teruel Existe acabó su discurso: "Adriana Lastra sale a interceptarle. Ha ido a hablar con él. Parece que ahí un cierto consuelo por como le coge y le saluda. Pero no quería ni mucho menos dejar pasar ese instante", concluye.