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Posado de verano

Los Reyes posan junto a sus hijas, Leonor y Sofía, en la Cartuja de Valldemosa

La familia real vuelve a posar para inmortalizar el comienzo de sus vacaciones de verano en Mallorca. Esta vez el lugar elegido es la Cartuja de Valldemosa.

La familia real ofrece el tradicional posado de verano que da comienzo a sus vacaciones en Palma de Mallorca. Los Reyes, junto a la princesa Leonor y la infanta Sofía, han posado en la Cartuja de Valldemosa y se han asomado a uno de los miradores.

Los cuatro han llegado sobre las 19:30 a la Cartuja de Valldemosa sonrientes en el inicio de sus vacaciones en Mallorca, después de que en el anterior posado en Santuari de Lluc tuvieran que hacerlo con la mascarilla puesta para cumplir con las medidas sanitarias por la pandemia de coronavirus. Palma de Mallorca se ha convertido en el lugar en el que cada verano se reúnen para disfrutar de las vacaciones y pasar tiempo en familia.

De los posados de hasta 16 personas de la Familia Real, se ha pasado a que solo lo formen los reyes y sus dos hijas. Como cada verano, han acudido con 'looks' veraniegos, con una indumentaria más informal de lo habitual y mostrando gestos de cariño y complicidad. En una de las celdas, que tienen en propiedad, han saludado a la familia Carvajal.

Además, han visitado la 'celda Chopin', donde el músico vivió durante tres meses, de diciembre de 1838 a febrero de 1839. La Familia Real ha escuchado también una de las obras de Chopin.

El recorrido de la Familia Real

Acompañados por autoridades municipales y representantes del Gobierno balear, los Reyes de España y sus hijas han empezado la visita siguiendo el recorrido habitual, comenzando por los jardines. Allí se han detenido para ver las vistas del valle y después han seguido al interior de la Cartuja donde se han detenido en la celda número 4 (la de Chopin). En la celda han escuchado una pieza de una de las composiciones del músico.

Después han salido a los jardines y han ido por un conjunto monumental que incluye una iglesia, un corredor de arcos blancos, una antigua farmacia llena de utensilios ancestrales y terrazas y jardines con vistas al valle de Valldemossa.

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