Rey Emérito
El rey Juan Carlos ha salido a navegar por la ría de Sanxenxo acompañado de su hija, la infanta Elena, que iba en una embarcación auxiliar.
El rey Juan Carlos ha vuelto a subirse al 'Bribón', junto a la tripulación que prepara ya esta primera regata del VI Circuito Liga Española 2024 en la categoría de seis metros, que se celebra este fin de semana en Sanxenxo. Allí le han recibido con besos y abrazos.
Lo hemos vuelto a ver en el Real Club Náutico junto a sus amigos y su hija, la infanta Elena, que iba en la embarcación auxiliar. La infanta llegó anoche para encontrarse con su padre como suele hacer siempre que el rey emérito vuela a Galicia. Doña Elena pasará con él todo el fin de semana como ya ha hecho en otras ocasiones durante la estancia en la casa de Pedro Campos y compartirán una vez más la afición por el mar y las regatas.
Este viernes es jornada de entrenamientos de cara a la prueba del fin de semana del campeonato que será la primera de siete regatas que componen el Circuito de la Liga y que servirá para la clasificación del campeonato del Mundo, al que también suele asistir el rey emérito.
El pasado miércoles aterrizó en el aeropuerto de Vitoria por la mañana, en un vuelo privado procedente de Ginebra (Suiza). Se dirigió hasta la clínica privada de sus dos médicos de confianza y amigos íntimos, Eduardo Anitua y Mikel Sánchez, para realizarse un chequeo médico habitual y donde también estuvo ya los meses de abril y noviembre del pasado año. Tras pasar la jornada con ellos voló hasta el aeropuerto de Vigo.
Ya en Sanxenxo (Pontevedra) se ha instalado en casa de su amigo Pedro Campos a la espera de salir a navegar cuando las condiciones climatológicas así lo han permitido. Porque, como es habitual, su cita con las regatas es la que marca el calendario de Juan Carlos I y sus viajes a España desde que salió de la Zarzuela en agosto de 2020.
También lo hemos visto en otras celebraciones familiares como la jura de la Constitución de la princesa de Asturias o el 60 cumpleaños de la infanta Elena.
Destacaba hace poco más de dos semanas una imagen con su hijo Felipe VI a la salida de la misa funeral por el hermano de la reina Sofía, Constantino de Grecia, en la capilla de San Jorge, en Windsor (Londres). Padre e hijo salían del brazo, una imagen que pudieron recoger los medios de comunicación que los esperaban en la puerta.
Fue un gesto muy comentado al ser la primera vez que reaparecían juntos ante los medios casi cuatro años después de que se acordase la salida de España del rey emérito.
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