Castilla y León
El portavoz de Podemos en las Cortes se ha negado a retirar lo dicho y Carlos Pollán, presidente de la Cámara, le ha retirado la palabra.
Nueva bronca en las Cortes de Castilla y León. Esta vez los ataques han tenido lugar entre Podemos y Vox. Carlos Pollán, miembro de Vox y presidente de la Cámara, le ha retirado la palabra a Pablo Fernández Santos, portavoz de Podemos, después de que este haya llamado "fascista" al vicepresidente y miembro de Vox Juan García Gallardo. Tras ello, Fernández se ha negado a retirar sus opiniones.
El portavoz de Podemos ha iniciado su exposición dirigiéndose a Gallardo como alguien que "procesa la ideología fascista". Tras esta afirmación, el presidente de la Cámara le "ha llamado al orden" y, tras el toque de atención, el portavoz de Podemos ha ido más allá con sus palabras y ha llamado a Juan García Gallardo "racista", "fascista" y "homófobo", entre otros calificativos.
Tras el tenso momento que se ha vivido entre Fernández y Gallardo, el portavoz de Podemos se ha retirado de la tribuna, tal y como Carlos Pollán le había pedido instantes anteriores.
No ha sido la única bronca entre ambos
No es la primera vez que un discurso en las Cortes de Castilla y León causa tanto revuelo. Pablo Fernández ya tachó de "vergüenza" y de "puta basura" la Proposición No de Ley (PNL) en contra del Decreto autonómico de Memoria Histórica, presentada por Vox en el año 2019. Desde entonces, han sido numerosas las disputas generadas ente ambos partidos en dicha comunidad autónoma.
El portavoz de Podemos también usó los calificativos "deleznable, miserable, asqueroso y bochornoso" para referirse a tal propuesta. Además, Fernández aseguró que se le "cae la cara de vergüenza" que la sede de "las castellanas y leonesas" tenga que sustanciarse con una "mierda".
El actual Gobierno de Castilla y León
Fue en el pasado marzo cuando Partido Popular y Vox llegaron a un acuerdo para formar Gobierno tras las elecciones de Castilla y León. El PP finalmente tuvo que ceder. No hubiera podido gobernar en solitario como quería y por tanto, anunció un pacto entre PP y Vox para la legislatura. Desde entonces, Vox se quedó con la Presidencia de las Cortes, la Vicepresidencia y tres consejerías, la de la Presidencia, la de Industria, Empleo y Comercio y, por último, la de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural.