EN PALMA DE MALLORCA
La reina y sus hijas, que no acudían al Club Náutico de Palma desde agosto de 2015, han llegado en coche a las proximidades del edificio y los últimos cien metros los han recorrido a pie en medio de un intenso calor para que los medios gráficos pudieran tomar imágenes.
A continuación, se han dirigido al pantalán, donde ya estaba el Aifos 500 desde hacía unos diez minutos, y don Felipe las ha ayudado a cruzar la pasarela para subir al velero. Primero ha cruzado la princesa de Asturias, luego su hermana y por último lo ha hecho la reina, y Felipe VI les ha dado un beso, según informa EFE.
El rey les ha presentado a la decena de miembros del equipo, encabezado por el patrón, el almirante Jaime Rodríguez Toubes, y del que forma parte una mujer. La princesa y la infanta, que al igual que la reina iban con ropa veraniega, han entrado al compartimento del velero para que don Felipe les explicara algunos de los detalles de la embarcación.
Tras posar ante los fotógrafos y despedirse de la tripulación, los reyes y sus hijas han abandonado el barco y se han dirigido a la cafetería del Club Náutico para tomar un refrigerio. En un ambiente distendido, los cuatro se han sentado en una de las mesas y han estado charlando con algunos participantes de la Copa y haciéndose fotos. Doña Letizia ha tenido que abanicarse por el calor. La visita se ha prolongado durante una media hora, tras la cual, los reyes, la princesa y la infanta se han marchado en el vehículo que conducía él.
La última vez que doña Letizia y sus hijas estuvieron en el Club Náutico palmesano fue en agosto de 2015, también en el último día de competición de la Copa. En aquella ocasión, los reyes, la princesa de Asturias y su hermana llegaron juntos en coche antes del comienzo de la regata, y, antes de zarpar, don Felipe subió con sus hijas a la cubierta del Aifos para explicarles cómo era el barco por dentro. En 2010 y en 2011, las hijas de los reyes también estuvieron en el RCNP en la semana de la Copa del Rey.
Antes de que llegara su familia, el jefe del Estado ha ido al muelle donde estaba el Earlybird, el barco alemán ganador de la categoría en la que ha competido el Aifos 500, para darles la enhorabuena por la victoria. Este sábado, el velero de la Armada Española partía en sexta posición y, tras las últimas pruebas, ha mantenido el mismo puesto, de un total de diez participantes, acorde al rendimiento que se esperaba del barco, cedido por un astillero finlandés.
Felipe VI ha navegado en las seis jornadas de competición y también lo hizo en la sesión previa de entrenamiento. Después de acariciar la victoria el pasado año, se le sigue resistiendo el título a don Felipe, que nunca ha ganado la Copa, a pesar de haber competido en numerosas ocasiones.
En la última jornada del torneo también ha navegado la infanta Elena con el Titia, en la clase 6 Metros Internacional (6M), que ha quedado segundo entre los veleros clásicos, por detrás del Bribón, capitaneado por Pedro Campos. El Bribón es el barco en el que iba a haber competido el rey Juan Carlos, pero una lesión en la muñeca se lo impidió.
Felipe VI va a presidir a última hora de la tarde de este sábado la entrega de premios de la Copa en el recinto amurallado de Ses Voltes del Parc de la Mar, junto a la Catedral de Palma, con la presencia de la mayoría de tripulaciones que han formado parte en las regatas, disputada desde el pasado lunes en aguas de la bahía de Palma.