COMISIÓN PERMANENTE DE LA EJECUTIVA GENERAL
La Ejecutiva Federal del PSOE aprobará este lunes con toda probabilidad el calendario para elegir a su nuevo secretario general a través de una consulta a todos los militantes, opción que ya ha sido rechazada por Carmen Chacón, que ha anunciado su renuncia a la carrera para suceder a Alfredo Pérez Rubalcaba.
En una carta abierta a los militantes, Chacón ha arremetido contra el todavía líder del PSOE y ha avanzado que apoyará al candidato a secretario general que defienda unas primarias abiertas para escoger al candidato socialista a la Moncloa. Unas elecciones, abiertas a todos los "progresistas" y no sólo a los militancia del PSOE, a las que la exministra sí está dispuesta a presentarse.
En principio, la renuncia de Chacón no altera la propuesta que Rubalcaba elevará hoy a la Ejecutiva Federal, después de hablar con todos los dirigentes territoriales y otros referentes del partido y constatar que hay un amplio consenso para implantar el principio de "un militante un voto".
Con este plan, se da por seguro que presentará su candidatura el secretario general del grupo socialista en el Congreso, Eduardo Madina, quien había avanzado que si el congreso era abierto él optaría a liderar el PSOE. También se espera la candidatura de la presidenta andaluza, Susana Díaz, después de que buena parte de los barones territoriales se lo hayan pedido expresamente, mientras que el diputado Pedro Sánchez, que también suena en las quinielas, guarda silencio.
Quien sí ha anunciado públicamente sus deseo de optar a la secretaria general es el destacado miembro de la corriente Izquierda Socialista, José Antonio Pérez Tapias. En cualquier caso no hay mucho tiempo para decidirse porque, según el borrador del calendario que debate hoy la Ejecutiva, el plan es abrir el plazo para la recogida de avales ya el próximo viernes.
Los interesados tendrán hasta el 20 de junio para reunir entre el 5% y el 10% de firmas de los militantes -unas 10.000- antes de formalizar su candidatura, y luego dispondrán de quince días para hacer campaña antes de la consulta. Posiblemente coincidiendo con la final del Mundial de fútbol de Brasil, el 13 de julio, o una semana antes, estarán convocados a las urnas los algo más de 200.000 militantes que suman PSOE y PSC, así como todos los afiliados a las juventudes de ambos partidos.
Dado que la consulta previa no tiene carácter jurídico vinculante, el PSOE quiere mantener todos los requisitos que exigen los estatutos del partido para preservar la legitimidad del nuevo secretario general. Por eso, una vez que sea elegido por los militantes también tendrá que reunir entre el 20% y el 30% de los votos de los delegados del congreso -alrededor de un millar- para ser ratificado como secretario general del partido.