FECHA DEL JUICIO
El juzgado de lo Penal número 6 de Madrid juzgará el próximo 18 de febrero a la portavoz del Gobierno del Ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre, acusada de un delito contra los sentimientos religiosos por manifestarse con el torso descubierto en una capilla, hecho por el que se enfrenta a la petición de un año de prisión.
Según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, la diligencia de señalamiento remitida a las partes fija el juicio para el 18 de febrero a las 09.30 horas, en una sesión que se prolongará previsiblemente durante todo el día.
A raíz de una demanda de Alternativa Española, la Fiscalía de Madrid acusaba en junio en su escrito provisional a la portavoz del Gobierno municipal y a Héctor Meleiro, quien figuraba en la lista de Podemos a la Comunidad de Madrid, de un delito contra los sentimientos religiosos.
Maestre y Meleiro entraron el 10 de marzo de 2011 en la capilla del Campus de Somosaguas de la Universidad Complutense "guiados por el ánimo de ofender los sentimientos religiosos de los allí presentes y de todo el colectivo católico".
En presencia del capellán y de varios estudiantes que se encontraban allí orando, invadieron el espacio destinado al altar portando imágenes del Papa con una cruz esvástica y leyeron distintos pasajes de la Biblia, así como diversas citas de santos y obispos.
Acto seguido, Rita Maestre y otras mujeres no identificadas se desnudaron de cintura para arriba y, según el escrito de la fiscalía, abandonaron la capilla al grito de "vamos a quemar la Conferencia Episcopal", "el Papa no nos deja comernos las almejas", "menos rosarios y más bolas chinas", "contra el Vaticano poder clitoriano", "arderéis como en el 36" y "sacad vuestro rosarios de nuestros ovarios".
Por esos hechos, el fiscal pide para cada uno de los acusados un año de prisión y una pena accesoria de inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo.
Cuando en junio se conoció la acusación de la Fiscalía, Maestre señaló que tanto la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, como el resto de sus compañeros de Ahora Madrid ya conocían esa imputación, que a su juicio no la incapacita pues "la defensa del laicismo y de la protesta pacífica entroncan con los valores de Ahora Madrid".