Gobierno de España
Salvadora Mateos, la delegada del Gobierno en Ceuta (PSOE), se ha referido a las empleadas del hogar marroquíes que trabajaban hasta hace 2 años en Ceuta con el siguiente comentario: "Las amas de casa estamos deseando que vuelvan las muchachas". Otros partidos consideran que el comentario es "racista" y "clasista".
Las palabras de la socialista Salvadora Mateos han despertado muchas críticas entre la clase política de distinto signo. En una rueda de prensa, el pasado 1 de abril, Mateos fue preguntada por la apertura de fronteras y los transfronterizos. Fue entonces cuando la Delegada del Gobierno en la ciudad autónoma dijo que "en Ceuta, sobre todo las amas de casa, estamos deseando que vengan las muchachas, te lo digo empezando por mí. Estar trabajando por la mañana y de limpieza por la tarde la verdad que cuesta".
Ya son varias las formaciones políticas que han reaccionado a esas palabras.
Cuca Gamarra, secretaria general del PP, ha dicho que le parecen "declaraciones inapropiadas para un miembro del Gobierno de España" e "inaceptables" y más si las pronuncia "un Gobierno que se dice feminista y progresista y que luego trata a las mujeres con ese desprecio" Gamarra ha pedido "respeto" para las mujeres que trabajan en el ámbito doméstico.
Pablo Echenique, de Unidas Podemos, ha dicho al enterarse de la polémica en la sala de prensa del Congreso que "si ha dicho eso, son unas declaraciones desafortunadas como poco". Aina Vidal, de enComú-Podem, ha sido más crítica: "Es una suerte que su puesto de trabajo no dependa de mi persona. Son unas declaraciones bochornosas y clasistas que ponen en un lugar muy bajo en la categoría humana y solidaria a esa persona", ha dicho refiriéndose a Salvadora Mateos.
Guillermo Díaz, diputado de Ciudadanos, ha achacado la frase a "un mal día" de la delegada. Mireia Vehí, Portavoz de JxCat en la cámara baja, ha defendido que "hablar de esta forma tan faltona, como si fueran esclavas, me parece grave". Joan Baldoví, diputado de Compromís, ha dicho que las palabras de Mateos le parecen "hasta cierto punto un pelín clasistas" e "inadecuadas" a pesar de que, asegura, "hay mucha gente que necesita que se abra la frontera y se tiene que abrir".
Denuncian que es un comentario desafortunado
Pero la primera formación indignada con el comentario de Mateos fue Ceuta Ya, el pasado sábado. "Rancio", "clasista", "racista" fueron los primeros calificativos que le dedicaron a ese comentario miembros de la formación Ceutí. Julia Ferreras, secretaria de igualdad de Ceuta Ya, cree que el comentario es "impropio de una representante progresista del Gobierno de la Nación".
El portavoz del PSOE en el Congreso, Héctor Gómez, no se ha querido pronunciar sobre esas palabras de la delegada del Gobierno en Ceuta. Ante la pregunta sobre este asunto, el portavoz socialista se ha limitado a indicar que "siempre apelamos a las buenas relaciones con Marruecos, a la coordinación, al cumplimiento de la legalidad".
Las empleadas del hogar a las que se refería Salvadora Mateos llegaron a ser más de 2000 regularizadas y muchas otras en la economía sumergida. La delegada del Gobierno considera que la reapertura de la frontera no debería darse hasta que el paso del Tarajal sea "seguro", y para que eso ocurra, se deben instalar sistemas de control "inteligente" del tránsito de personas y debe corregirse el sistema vigente de solicitud de protección internacional por parte de ciudadanos del país vecino.
Asimismo, ha reiterado que los trabajadores transfronterizos serán "los primeros" en poder cruzar la frontera, tanto los que regresaron a Marruecos como los que permanecieron en Ceuta la madrugada del 14 de marzo de 2020.