Mesa de diálogo
Pedro Sánchez y Quim Torra llegan a la primera reunión de la mesa de diálogo con posiciones "antagónicas" y mientras el Gobierno mantiene que lo importante es "sentarse" a hablar, la Generalitat insiste en llevar a la mesa el derecho de autodeterminación, la amnistía y el "fin de la represión".
En la víspera de la reunión en Moncloa, el presidente Sánchez ha evitado aclarar qué espera de la mesa de diálogo. En la misma línea que la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, que ha restado importancia al perfil de los integrantes de la mesa designados por la Generalitat de Cataluña, entre los que hay personas que no son miembros del Gobierno catalán e, incluso, un investigado por el referéndum del 1 de octubre.
"Lo importante es sentarse", ha zanjado Calvo, que ha asegurado que no es requisito para ese diálogo que ambas delegaciones sean "paritarias" y ha valorado que estén encabezadas por ambos presidentes, Pedro Sánchez y Quim Torra.
La Generalitat, en cambio, sí tiene claro lo que pondrán encima de esa mesa. La portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha garantizado que tanto JxCat como ERC acuden a la mesa con "unidad de acción" y sin pretender hacer "dos negociaciones en paralelo".
Budó ha adelantado, eso sí, que la comitiva que encabezará Torra planteará su receta para resolver el conflicto catalán: ejercicio del "derecho de autodeterminación", amnistía para los encausados por el procés y "fin de la represión".
Para Pablo Iglesias, serán necesarias muchas reuniones para solucionar "un problema complejo que ha hecho tanto daño a nuestro país y a Cataluña".
En línea con lo adelantado por Carmen Calvo, el líder de Podemos ha reclamado respeto con la delegación que ha designado cada parte y ha adelantado que la tarea de la mesa "va a ser larga" y que sus miembros van a tener que emplearse "a fondo durante mucho tiempo" para "plantear soluciones" a un conflicto que ha hecho mucho daño tanto a Cataluña como al resto de España.