Cumbre del G20
El presidente del Gobierno participa en Bali en la cumbre del G20, durante la que celebrará este martes una reunión bilateral con Xi Jinping.
Bali se convierte desde este martes es algo así como la capital del mundo. La isla indonesia acoge a los líderes de las economías más desarrolladas y las emergentes. Y una de esas economías es la rusa. Si hay alguien con capacidad real de hablar con Putin, que ha preferido no venir a Bali, "ese es Xi Jinping" aseguran fuentes del gobierno español horas antes de que Pedro Sánchez se reúna con el mandatario chino.
La reunión no se había anunciado hasta hace unas horas, pero para el entorno del presidente supone uno de los contactos de mayor nivel en el contexto de las ambiciones internacionales de Sánchez. Ambos líderes tendrán ocasión de hablar sobre el desarrollo de la guerra en Ucrania y otros asuntos de la agenda bilateral.
Pero el interés de Moncloa es presionar, conjuntamente con los socios europeos, para que Xi mueva ficha y use su influencia para tratar de reconducir a Putin hacia una desescalada del conflicto.
Habría sido una imagen incómoda ver al líder ruso aquí en Bali, y no se producirá. No veremos posar a los principales líderes occidentales al lado del representante de Vladímir Putin en la cumbre del G20. El presidente ruso anunció la semana pasada que no asistirá por motivos de agenda -aunque puede que intervenga por videoconferencia-, y que estará representado por su ministro de Asuntos Exteriores, Sergei Lavrov.
Indonesia, el país que acoge y organiza el encuentro de los países más desarrollados y emergentes, se ha encargado de que los jefes de estado y gobierno no tengan que sentarse al lado o posar junto al representante de Putin.
El presidente del Gobierno español, junto a sus socios occidentales y europeos, ratificará en público, ante la presencia de Lavrov, el mensaje de condena a la invasión de Ucrania. Fuentes del gobierno desconocen aún si esa condena podrá trasladarse al comunicado final con el que suelen concluir las cumbres de este tipo. Esta vez hay reticencias entre algunos de los países miembros del G20 a rubricar un mensaje de condena a uno de los socios del club.
Un G20 más "bélico" que económico
La reunión, que se celebra este martes y miércoles en la isla de Bali, va a estar marcada este año por las consecuencias que la invasión de Ucrania tiene en la economía global. Y a diferencia de lo que suele ser habitual, Sánchez no estará acompañado por la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, sino que acudirá en compañía de su ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares.
Durante la cumbre habrá tres sesiones en las que se abordarán asuntos como las crisis energética y alimentaria, la inflación, la desaceleración económica, el aumento del endeudamiento o el cambio climático. En la primera de las sesiones intervendrán todos los líderes, y en las otras dos lo harán la mitad de ellos. Pedro Sánchez hablará en la primera y en la tercera de las sesiones, que versará sobre la transformación digital.
Reuniones bilaterales
Además, está previsto que Sánchez mantenga varias reuniones bilaterales. Se han confirmado encuentros con el presidente de Indonesia, Joko Widodo; el primer ministro de India, Narendra Modi; la presidenta de Singapur o la directora del Fondo Monetario Internacional.
Sánchez coincidirá durante su estancia en el Centro Internacional de Convenciones de Bali con el nuevo primer ministro británico, Rishi Sunak, o la primera ministra italiana Georgia Meloni, que se estrenan en el escenario multilateral.