LEY DE MEMORIA HISTÓRICA
Más de setenta fosas comunes con los restos de los 2.238 represaliados del franquismo confirman al cementerio de Paterna como la gran fosa común de la Comunitat Valenciana, y la recuperación de restos de casi 250 cuerpos en una docena de ellas ha permitido romper el silencio sobre ellas.
Este municipio anexo a Valencia, el primero en que hay constancia de un fusilamiento tras la Guerra Civil, el 3 de abril de 1939, y el segundo con más fusilados en la posguerra, se erige en símbolo de esta lucha.
Así lo demuestra la nueva exhumación de un centenar de fusilados de la fosa 112, iniciada este lunes, en una semana marcada por la decisión del Gobierno de activar el proceso para exhumar los restos de Francisco Franco de su tumba en el Valle de los Caídos.
El bullicio y la expectación con el que comenzaron ayer esos trabajos, con la presencia de familiares, autoridades y representantes de asociaciones, contrasta con el silencio que reina este martes en el camposanto paternero, solo roto por el tráfico de la cercana autovía, las explicaciones de los arqueólogos de ArqueoAntro y el trasiego de carretillas con la tierra retirada.