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El viernes se celebra el Congreso Federal socialista en Sevilla, al que Page ha definido como "un Congreso convocado desde el poder".
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha pronunciado este jueves sobre la dimisión de Juan Lobato como líder del Partido Socialista en Madrid, destacando su gran "valía" como político. En unas declaraciones a los medios durante la inauguración de la Escuela Infantil 'El Jardín de los Infantes' en Escalona (Toledo), García-Page subrayó que "la política, tarde o temprano, no puede prescindir de gente así".
El próximo viernes tendrán lugar dos actos. Por un lado el Congreso Federal del Partido Socialista en Sevilla, mientras que en Madrid, Juan Lobato declarará a las 10:00 horas ante el Tribunal Supremo. Lo que ha generado críticas entre miembros del partido.
"Una organización donde reina el silencio y reina el miedo"
La cita del fin de semana en la capital andaluza es "un congreso convocado desde el poder", así califica García-Page el acto socialista, donde no habrá discusión sobre el tema de los liderazgos en el partido y Sánchez será reelegido como secretario general del partido. Sin embargo, la exportavoz del PSOE, Soraya Rodríguez, quien dejó la formación roja por sus discrepancias con el presidente, define al partido como "una organización donde reina el silencio y reina el miedo".
El secretario regional de los socialistas castellanomanchegos, enfatizó su preferencia por abordar temas políticos con información sólida. Reconoció que no dispone de "la más mínima información" sobre la situación del PSOE en Madrid, más allá de lo que se ha publicado en los medios. "Cuando hablo quiero hablar con fundamento", afirmó, aunque reiteró su aprecio por Lobato, describiéndolo como "una persona de enorme valía".
Calificó de "lamentable" que la política se centre en resolver problemas internos y no en atender las necesidades de la ciudadanía. Según él, "la mayoría estamos en lo que hay que estar", pero reconoció que la neurosis actual en el ámbito político nacional "es muy preocupante".
El presidente mostró su inquietud por el hecho de que la política nacional está "quemando de forma acelerada mucho capital político", lo cual afecta tanto a su partido como a otros políticos. García-Page hizo hincapié en que "hay muchísima gente que está resultando dañada o quemada", lo que representa un problema generacional para la clase política.
Refiriéndose a las palabras de Lobato en su carta de dimisión, donde expresó su rechazo a la destrucción del adversario y a la aniquilación del que discrepa, García-Page coincidió en que estas actitudes son "algo obvio" y lamentó el doloroso proceso que enfrentan aquellos políticos valiosos que se ven atrapados en estas circunstancias.
Durante su intervención, García-Page también defendió la trayectoria del presidente de la Diputación de Badajoz y líder de los socialistas extremeños, Miguel Ángel Gallardo, quien enfrenta una situación legal complicada. El presidente castellanomanchego se mostró convencido de que el pacense saldrá bien parado de "ese pleito", expresando su deseo de que tanto él como otros miembros del partido logren salir lo mejor posible de sus situaciones.
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