LAS CUENTAS DE AMY MARTIN
El sorprendente caso de Amy Martin o Irene Zoe Alameda parece el manual perfecto sobre "cómo vivir de las subvenciones". Esta artista poliédrica, como ella misma dice, llegó a cobrar 122.000 euros del Ministerio de Cultura en sólo dos años: de 2009 a 2011.
Además en septiembre de 2009 fue nombrada directora del Instituto Cervantes en Estocolmo. En su perfil de Facebook sigue apareciendo como directora de este ente público, pero lo cierto es que la despidieron, a penas un año después de contratarla. Por este trabajo cobró 100.000 euros.
Como escritora, su caché es equivalente al de un premio Nobel: 3.000 euros por artículo para la página web de una fundación. Cuando un columnista de prestigio en un periódico nacional cobra una décima parte. Por sus textos para la Fundación Ideas ingresó otros 50.000 euros. En total, en sólo cuatro años, cobró 272.000 euros de dinero público.
Y todo esto, asegura ella, sin que su marido, Carlos Mulas, supiera nada. Una versión que en el PSOE no parecen creerse. Irene Zoe Alameda asegura que desde 2009, Carlos Mulas y ella están separados emocional y físicamente, pero hoy en día sus vecinos y su buzón dicen lo contrario.