SEGÚN INFORMAN FUENTES POLICIALES
Los Mossos d'Esquadra ha retirado el servicio de escolta a los consellers de la Generalitat cesados por el Gobierno en aplicación del artículo 155 de la Constitución, aunque aún lo mantienen por motivos de seguridad para Carles Puigdemont, destituido como presidente del ejecutivo catalán.
Según han informado fuentes policiales, los Mossos, que ya están bajo el mando del Gobierno tras la destitución de la cúpula del departamento de Interior, han acordado retirar el servicio de escolta a los hasta ahora consellers del ejecutivo de Puigdemont, al dejar de formar parte del gobierno catalán por la aplicación del artículo 155.
Sin embargo, estas fuentes han precisado que Puigdemont mantiene un servicio de escoltas para garantizar su seguridad, como ocurre con los expresidentes de la Generalitat, medida que también podría extenderse a algún ex conseller en función del riesgo que se calibre para su seguridad.
La mayoría de los hasta ahora consellers se despidieron de sus escoltas de los Mossos d'Esquadra, así como de sus chóferes, lo que sorprendió a los agentes, que desconocían que ya no iban a prestar más el servicio de guardaespaldas de los miembros del gobierno catalán.
Según las fuentes, la retirada del servicio de escoltas es una decisión del nuevo jefe de los Mossos, adoptada por criterios técnicos y no políticos, como ocurre en la mayoría de casos en que un conseller deja el cargo. De hecho, según las mismas fuentes, entra dentro de la normalidad retirar el servicio de escolta a los consellers que han dejado de serlo y conservarlo para el expresidente, como se ha hecho siempre hasta el momento.
En cualquier caso, si alguno de los hasta ahora consellers que han tenido protección y han dejado de tenerla considerara o contemplara algún riesgo, podría comunicarlo a los Mossos d'Esquadra para que se hiciera una valoración técnica de su situación y se adoptaran las medidas pertinentes, según las fuentes.
En aplicación del artículo 155 de la Constitución, el Gobierno ha cesado a todo el gobierno catalán, ha disuelto el Parlament y ha convocado elecciones autonómicas para el próximo 21 de diciembre. En el área de seguridad, el Gobierno ha cesado al hasta ahora conseller de Interior, Joaquim Forn, al secretario general, César Puig, el director de los Mossos, Pere Soler, y el mayor, Josep Lluis Trapero, que será sustituido por su número dos, Ferran López, bajo el mando directo del secretario general técnico de Interior, Juan Antonio Puigserver. Ferran López ha pedido a los agentes que continúen trabajando con la misma "profesionalidad y lealtad" con la que han actuado hasta ahora y ha garantizado que mantendrá intacta la actual estructura de mando y el "normal funcionamiento" del cuerpo.
Por su parte, Trapero ha acatado su cese como mayor, a través de una carta en la que ha pedido a los agentes de la policía catalana que mantengan la "lealtad y comprensión" hacia las decisiones de los mandos que le relevarán.