CRITICA EL "NUEVO RIQUISMO"
El ministro de Defensa, Pedro Morenés, ha adelantado que la celebración por la Fiesta Nacional el próximo 12 de octubre incluirá cambios para que sea un acto "austero", aunque "digno", como ocurrió con la conmemoración del Día de las Fuerzas Armadas, el pasado mes de junio en Valladolid. ha recordado que el Ministerio fue "felicitado por todo el mundo" por "la dignidad" de ese acto a pesar de que se gastó "el 15% de lo que había costado el anterior" año.
En concreto, de 1,3 millones de euros se pasó a 200.000 euros, principalmente por la eliminación de la tradicional exhibición operativa militar. "Ese es el camino, ya está bien de la historia del derroche y del nuevo 'riquismo'. Se puede ser digno siendo austero", ha afirmado el ministro. A su juicio, la "dignidad" tiene que ver "con cómo se hacen las cosas, con qué cariño se hacen, y no con el derroche y la mala administración".
En el desfile de la última Fiesta Nacional organizada por el anterior Gobierno, el pasado 12 de octubre, participaron unos 3.000 militares, así como 147 vehículos y hasta 55 medios aéreos. Morenés ha reconocido que el Ministerio de Defensa está "sufriendo una tremenda presión" por los recortes presupuestarios, aunque ha apuntado que esta "extraordinaria presión" afecta a todo el Gobierno y a la sociedad en su conjunto.
Por ello, el ministro está impulsando una "revisión general" de la Defensa, que conducirá a su "reorganización". Pasa, ha explicado, por definir los escenarios de riesgo y amenaza a los que se enfrenta España y que pueden ser asumidos por las Fuerzas Armadas en el actual escenario económico, un "asunto complejo" que no se había abordado "nunca" de esta manera.
En primer lugar, según ha indicado, se trata de exponer el escenario de "peligros, riesgos y amenazas" en el que se ven envueltos "España y sus intereses" y después comprobar a cuáles de estas situaciones puede hacer frente España "con capacidad propia" y de una manera "creíble". Parte de esta tarea es el objeto de la Directiva de Defensa Nacional, que avalará el próximo martes el Consejo de Defensa Nacional, reunido por primera vez desde el cambio de Gobierno.
El documento pondrá "negro sobre blanco cuál es el escenario y cómo se llega a él". "Tendremos que ver cómo podemos hacer unas Fuerzas Armadas más eficientes y más eficaces partiendo de lo que tenemos, poniéndolo a la luz de la situación económica y geoestratégica y ver a dónde llegamos", ha señalado Morenés.
Acudir a las alianzas internacionales
Además, ha explicado que también se va a analizar qué capacidades que no se puedan "atender" o a las que no se otorgue "prioridad" se pueden cubrir con la participación en alianzas internacionales como la OTAN o la Unión Europea, a través de programas de la denominada 'defensa inteligente'. En definitiva, se trata de ver "qué somos capaces de hacer con las capacidades económicas que tenemos". "Y lo que no podamos hacer, tendremos que establecerlo, conocerlo y decirlo", ha recalcado, porque "es importante que la sociedad conozca también cuáles son los riesgos y las amenazas en las que España podría verse inmersa".
En cualquier caso, el ministro se ha mostrado convencido de que España cuenta con unas Fuerzas Armadas "razonables" y ha garantizado que los militares van a hacer "el máximo posible, en solidaridad con el resto de los españoles".
Por otra parte, Morenés también ha destacado la importancia de la inteligencia económica, que no ha sido "muy desarrollada" en España y que el Gobierno quiere impulsar. En la Estrategia Española de Seguridad aprobada por el anterior Gobierno a propuesta del Ministerio de Defensa, y que el actual quiere revisar, se instaba a la creación de un Sistema de Inteligencia Económica. Morenés ha apuntado que este asunto será competencia del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), que desde el pasado diciembre ya no depende orgánicamente de Defensa, sino de Presidencia del Gobierno.
No obstante, también ha explicado que a las Fuerzas Armadas les interesa esa inteligencia porque "la situación económica de los países es clave para entender la inestabilidad política". Por ello, se están desarrollando capacidades vinculadas a la incidencia que "problemas de tipo económico o financiero" puedan tener "en el desarrollo de capacidades militares" en países que "preocupen" a España.
Revisar Líbano en 2013
En relación con las misiones en el exterior, Morenés ha recordado que este año se replegará el 50% del contingente en Líbano y ha explicado que el año que viene habrá que volver a "analizar" la situación para diseñar el futuro de la misión. Además, ha recalcado el "éxito" del trabajo de los militares españoles en Afganistán y ha vuelto a señalar que si se "consolida" la impresión de que la misión se va a cumplir antes de lo previsto podrán modificarse los plazos de la retirada.
En general, Morenés ha insistido en que cualquier repliegue debe garantizar que se cumple con la misión encomendada y con el pacto alcanzado con la comunidad internacional y que no se pone en peligro la seguridad de las tropas.
Preguntado por la polémica suscitada después de que calificara en el Congreso de "gran amigo" al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, Morenés ha insistido que España y Venezuela "por razones históricas" deben tener "unas relaciones profundísimas", como con el resto de países iberoamericanos. "De esto se trata y el querer sacar punta a este asunto es un tema poco afortunado", ha defendido Morenés, partidario de no "personalizar" las relaciones institucionales entre dos países.
Como ya hiciera en la Cámara Baja en respuesta a una pregunta del portavoz de Izquierda Plural, José Luis Centella, Morenés ha vuelto a señalar que España es "un país soberano en sus relaciones" tanto con Estados Unidos como con Venezuela. "Nosotros tenemos una vinculación con los países iberoamericanos que es absolutamente lógica y que España quiere mantener", ha remachado.