llevaba más de ocho horas de retraso
El presidente del Parlament, Roger Torrent, ha decidido aplazar el pleno previsto para este jueves -que ya llevaba más de ocho horas de retraso- ante el bloqueo político fruto de las dudas jurídicas en torno al voto delegado de los diputados de JxCat y ERC suspendidos por el Tribunal Supremo. Según fuentes parlamentarias, Torrent está consultando a los grupos parlamentarios la nueva fecha para la tercera y última jornada del Debate de Política General, en la que se tienen que votar las propuestas de resolución y que probablemente se aplazará hasta el martes de la semana que viene por la tarde.
El pleno debía iniciarse a las 12.00 horas de este jueves, pero el choque de criterios entre JxCat y ERC ha obligado a ir retrasando la hora de inicio. A primera hora de la tarde, los grupos independentistas han anunciado un acuerdo para desencallar la situación, pero los letrados han expresado sus reticencias y el debate en el seno de la Mesa ha vuelto a eternizarse. Según las fuentes consultadas, este viernes volverá a reunirse la Mesa para analizar las peticiones de reconsideración de PSC y Ciudadanos a la validación del acuerdo JxCat-ERC, que tampoco ven claro los comunes.
Hasta el momento en el que ha anunciado la suspensión del Pleno, Torrent ha dado por buena la fórmula pactada por JxCat y ERC para la votación de los diputados procesados, pese a las reticencias que han expresado los letrados de la Cámara catalana y la oposición de Ciudadanos y PSC. En la reunión de la Mesa del Parlament, la mayoría de cuatro miembros JxCat y ERC en este órgano, incluido Torrent, ha validado el acuerdo entre las dos formaciones independentistas, mientras que los representantes de Ciudadanos y PSC han anunciado que presentarán una petición de reconsideración.
Los escritos que han presentado finalmente JxCat, pese a no ser iguales que los que presentó ERC, cumplen con los requisitos que pedía Torrent, quien, aseguran, no está inquieto por eventuales consecuencias judiciales por dar este paso, habida cuenta que su antecesora, Carme Forcadell, está en prisión preventiva. El presidente del Parlament considera que esta solución cumple con su voluntad de preservar los derechos de los diputados afectados por la suspensión del juez del Supremo Pablo Llarena, garantizar la efectividad de las votaciones y no alterar las mayorías resultantes de las elecciones del 21-D.
Fuentes de la oposición han confirmado que los letrados del Parlament consideran que el acuerdo entre JxCat y ERC no subsana los errores de los que ya habían alertado esta mañana, aunque desde el entorno de Torrent han puntualizado que solo han expresado "reticencias".
Las cúpulas de JxCat y ERC han alcanzado un acuerdo para desencallar el voto delegado de los diputados suspendidos por el Tribunal Supremo, tras la reunión al más alto nivel que se ha celebrado en el despacho del president Quim Torra en el Parlament. El acuerdo pasa por que los cuatro diputados de JxCat afectados -Carles Puigdemont, Jordi Sànchez, Jordi Turull y Josep Rull- registren un escrito individual en el que avalen el documento que a su vez ha presentado por la mañana el portavoz de su grupo, Albert Batet, anunciando que "continuará votando en representación" suya e invocando la delegación de voto que ya ejercían desde la primavera.