AUNQUE NO ES SU ELECCIÓN FAVORITA
A preguntas de los ciudadanos, ha asegurado que el proceso soberanista no está rompiendo la convivencia en Cataluña, pero sí la pondría en peligro no permitir la consulta a los catalanes, "porque eso es lo mismo que negar su existencia. Para la convivencia, ir a votar no es peligroso; no poder votar sí lo es".
Mas ha lamentado que el diálogo con Madrid no sea posible, aunque ha aseverado que llegados a este punto, "la marcha atrás no es una opción, sería un error muy grande".
El presidente catalán ha recordado que su hoja de ruta una vez descartado el referéndum pactado pasa por crear una ley de consultas catalanas, y si ésta es recurrida por el Estado, decidirá si usar "el marco legal de las elecciones, que podrían ser anticipadas, o no".
El también líder de CiU no ha precisado qué porcentaje de votos se consideraría una victoria, y ha admitido que la independencia "no significa que al día siguiente todo cambie a mejor".
Preguntado por los recortes sociales, Mas ha dicho que Cataluña tiene ahora un 20% menos de ingresos que hace tres años, por lo que han tenido que tomarse "decisiones complicadas".
En ese sentido, ha argumentado que la Generalitat no decide el volumen de gasto, sino que "Madrid impone de forma unilateral el déficit".
Mas ha defendido que los recortes han ido en la línea de tocar lo menor posible las políticas sociales, por lo que ha subrayado que se han reducido salarios públicos ya que con estas medidas "perjudicas a la personas, no al servicio que reciben los ciudadanos".