Gobierno
Montero asegura que la financiación singular catalana mantiene la solidaridad con el resto.
La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha comparecido en el pleno del Congreso bajo petición del PP. Mantiene que el acuerdo fiscal con ERC para un concierto económico en Cataluña está amparado en la Constitución y en el Estatuto de Autonomía de esta región. También ha instado al Partido Popular a ver este pacto fiscal como "un estímulo" para llegar a un acuerdo para reformar la financiación autonómica y evitar de esta forma, ha dicho, el inmovilismo y la confrontación entre territorios.
Montero ha atacado al PP durante gran parte de su comparecencia por despreciar este acuerdo fiscal con ERC, reprochándole una vez más su negativa a apoyar la senda de estabilidad. Montero ha vuelto a presentar gran parte de los argumentos que ya lleva utilizando en el último tiempo para defender la financiación singular para Cataluña, asegurando que es constitucional y que garantiza, según ha remarcado, la solidaridad interterritorial
De la misma forma, la ministra ha insistido en que para asegurar el mismo nivel de servicios públicos en todo el territorio español, las comunidades gobernadas por el PP deben hacer un "esfuerzo fiscal" para igualar esa cantidad de recursos.
La ministra también ha recogido la reivindicación hecha por las comunidades infrafinanciadas acerca de crear un fondo de nivelación mientras se reforma el sistema de financiación autonómica. En cuanto a esto, ha dicho que es una petición del PP y ha denunciado el "bandazo" de los 'populares' a reclamar este fondo transitorio para determinadas comunidades, a la vez que critican que Cataluña salga del régimen común en materia de financiación, alegando que este fondo de nivelación también recoge singularidades.
Montero ha dicho que el acuerdo entre el PSC y ERC para que Cataluña empiece a recaudar el 100% de los impuestos es "público", después de que el PP y el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, dijeran que no conocían este texto.
A principios del mes de septiembre hizo lo propio para ofrecer explicaciones, esta vez en el Senado. Allí, aseguró que el Gobierno cumpliría con la literalidad del acuerdo fiscal firmado con Esquerra, a la vez que invitó al conjunto de formaciones políticas a trabajar en la reforma del modelo de financiación autonómica. Se trata de un modelo, que insiste la titular de Hacienda, supondrá más recursos para todas las autonomías.
Esta es una comparecencia que fue impulsada por el PP para que la número dos de los socialistas ofreciese explicaciones sobre "el secesionismo fiscal que ha acordado con sus socios de forma bilateral y fuera del sistema de financiación de Comunidades Autónomas de régimen común, a cambio de presidir la Generalitat de Cataluña y seguir presidiendo el Gobierno de España".
La intervención de María Jesús Montero se produce en pleno proceso de las negociaciones con Junts para conseguir sacar adelante los objetivos de estabilidad, después de que el Gobierno optara por aplazar su tramitación al no contar con los apoyos suficientes para sacarlo adelante.
La principal condición que pone Junts sobre la mesa para apoyar esta senda de estabilidad es que las comunidades autónomas puedan disponer de un tercio del límite total del déficit, lo que conllevaría quitar unos 12.000 millones de euros en capacidad de gasto a la Administración General del Estado que pasaría a manos de las autonomías.
El Gobierno considera que lo planteado por Junts va demasiado lejos, aunque se muestra con disposición de moverse para alcanzar un acuerdo con la formación independentista que permita sacar adelante la senda de estabilidad. Entre todo esto, ERC ha criticado que el PSOE no se plante ante el "chantaje" al que le somete Junts en cada votación que se produce en el Congreso tras los últimos distanciamientos, de la misma forma que avisa que la senda de estabilidad también la tendrán que negociar con los republicanos, que tienen sus propias reivindicaciones.
De cualquier manera, el acuerdo fiscal con ERC para que Cataluña salga del régimen común de financiación dio lugar a bastantes críticas internas en el seno interno de los socialistas, con diversas federaciones territoriales rechazando de manera explícita este acuerdo.
A pesar de ello, los 'barones' pudieron plantear sus dudas y sus críticas dentro del Comité Federal que llevó a cabo el PSOE hace unas semanas y las federaciones territoriales rebajaron sus quejas dentro de este órgano interno. Los que mantuvieron sus críticas a este concierto económico para Cataluña fueron los líderes socialistas en Castilla-La Mancha y Aragón, Emiliano García-Page y Javier Lambán, respectivamente, que sí que se mostraron en el Comité Federal contra el acuerdo con ERC.
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