Pandemia política
Madrid ha sido, y es, el punto donde miran todos por la pandemia de coronavirus y sus rebrotes, pero también el campo de batalla entre el gobierno de coalición PSOE-Podemos y la oposición del Partido Popular. Y todo ello, mezclado, además, con la lucha interna en el gobierno de coalición de la comunidad de Madrid, donde el PP dice una cosa y Ciudadanos trata de diferenciarse.
En medio de la puesta en escena más comentada, sobre todo por las banderas y la puesta en escena de la reunión entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la presidenta de la comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ella dice la frase: "Madrid es una España dentro de España". El presidente firma en el libro de visitantes con un "la unión hace la fuerza", pero no pierde ocasión de señalar al PP: "La antipolítica solo sirve para señalar culpables imaginarios, odio y enfrentar a la sociedad". También el ministro de Sanidad, Salvador Illa critica la falta de respuesta a sus supuestas ofertas de diálogo.
La respuesta, según el presidente del PP, Pablo Casado, es una pregunta: "Me gustaría saber por que´Sánchez está más preocupado por la propaganda que por salvar vidas, en lo que su Gobierno no ha sido muy eficaz". La dirección del partido apoya a Ayuso, pero los dirigentes territoriales son más tibios. El gallego Núñez Feijóo dice que "la presidenta tenía razón".
Pero también hay diferencias dentro del Gobierno de la comunidad. Su vicepresidente, Ignacio Aguado, de Ciudadanos, las marca continuamente, mostrando su frustración por la falta de diálogo y que se haya llegado al estado de alarma.
Vox, a lo suyo, anima a salir a la calle 12 de octubre, busca las ganancias del río revuelto. "Se trata de defender al pueblo español de la gestión negligente e indecente de este Gobierno", dice Santiago Abascal.