UNA COLABORACIÓN PARA "COMPETIR INTERNACIONALMENTE"
El alcalde de Barcelona, Xavier Trias, y la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, han escenificado la voluntad de ambas ciudades de convertirse en ejemplo de un nuevo modelo de crecimiento económico al margen de sus discrepancias sobre el modelo territorial de España. Trias ha pronunciado una conferencia en el club Siglo XXI, donde ha sido presentado por la alcaldesa de Madrid y ha estado acompañado, entre otros, por el presidente del Consejo de Estado, José Manuel Romay Beccaria, y el vicepresidente cuarto del Congreso, Jordi Jané.
Un foro en el que ha manifestado que Madrid y Barcelona deben seguir colaborando "estrechamente" para competir internacionalmente, pues tienen "todo el potencial" para ser "la punta de lanza" de la salida de la crisis. El alcalde de Barcelona ha hecho sólo una alusión al actual "momento político complicado, con una difícil relación entre Cataluña y España", mientras que Botella ha incidido en las "profundas discrepancias sobre el futuro de Cataluña y la vertebración de España" que mantienen ambos responsables políticos.
Sin embargo, los dos se han centrado en el papel de ambas ciudades como motores de salida de la crisis e impulsoras de un nuevo modelo de crecimiento económico. "Barcelona y Madrid están en disposición de convertirse en un modelo urbano de futuro en el siglo XXI", ha dicho Trias, optimista ante el futuro de la ciudad y partidario de impulsar un modelo centrado en el conocimiento, los servicios avanzados, la innovación y la tecnología, es decir, en la ciudad inteligente.
Ha recordado que Barcelona es Capital Mundial del Móvil y ha sido escogida Capital Europea de la Innovación, dos muestras de que se trabaja duro para que sea reconocida como "ciudad de cultura, conocimiento, creatividad, innovación y bienestar", pues "el modelo basado en la construcción ya no sirve". A su juicio, Madrid y Barcelona pueden compartir proyectos, estrategias y perspectivas con las grandes urbes del mundo y poner en valor sus "activos de calidad urbana y calidad de vida".
El alcalde ha incidido en las "señales positivas de recuperación económica" que aprecia en áreas como el turismo y la industria, además del incremento de la inversión extranjera y las exportaciones, si bien ha reconocido que las cifras de paro, con 108.000 desempleados (aproximadamente un 14 % de la población), son "absolutamente inaceptables".
Ana Botella, en su intervención previa, ha manifestado que ambas ciudades "están llamadas a liderar el avance de España entre los países más relevantes del escenario internacional". La alcaldesa madrileña ha subrayado la "gran responsabilidad" que tienen ambas urbes: "ser ejemplares y desempeñar un papel fundamental en esta recuperación que pasa por crear un entorno favorable a la inversión, al desarrollo empresarial, teniendo como objetivo prioritario la creación de empleo".
También ha destacado entre las obligaciones de ambas ciudades el ser "abiertas al mundo, innovadoras, solidarias, accesibles, modernas y tolerantes", que no pueden permitirse "el lujo" de encerrarse en sí mismas.