CONDENADO A SEIS AÑOS DE CÁRCEL POR PERTENECER A SEGI
Coincidiendo con una manifestación convocada por el movimiento Herri Harresia para defender la desobediencia civil pacífica, Goñi -tal y como anunció en un vídeo- ha aprovechado la cobertura de ese "muro popular" con el que la izquierda abertzale protege a los condenados por actividades relacionadas con ETA para evitar que sean detenidos.
El anuncio de la aparición de Goñi hecho público esta semana había alertado a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, que desde primera hora de la mañana han desplegado en la localidad de Barañain -de la que Goñi es vecino- y en Pamplona un fuerte dispositivo de vigilancia.
El joven, quien desde que conoció su condena ha permanecido escondido, anunció que no participaría en la manifestación pero que la seguiría para posteriormente salir, de forma que los convocantes de la marcha evitaran su detención con un "muro popular", si bien la delegada del Gobierno en Navarra, Carmen Alba, advirtió ayer de su arresto en caso de que apareciese.
De hecho, la manifestación, con varios miles de participantes, se ha desarrollado por las calles de Pamplona sin incidentes aunque vigilada por un fuerte dispositivo policial, y ha transcurrido en un tono festivo tras una pancarta con el lema "Desobedientziaz libre bizi" (Vive libre mediante la desobediencia).
Tras más de una hora, en la que los manifestantes han reivindicado su objetivo con diversos lemas en pro de la desobediencia civil y con pañuelos, camisetas y otras prendas del color naranja que caracteriza al movimiento, han llegado hasta el Paseo de Sarasate, donde la lectura de un comunicado ha dado fin a la cita.
Muchos de los participantes se han dirigido entonces hasta la plaza de Navarrería, en el caso viejo pamplonés, donde tras media hora de expectación y ya sin aparente vigilancia policial, tres personas que tapaban sus rostros con prendas de color naranja han desplegado desde el tejado de un edificio una gran pancarta con lemas alusivos a sus reivindicaciones.
Poco después, rodeado de familiares y entre aplausos y gritos de ánimo de las centenares de personas congregadas, desde una de las calles adyacentes ha aparecido andando Luis Goñi, quien se ha situado en la base de la fuente de la plaza de la Navarrería, donde inmediatamente ha sido rodeado por el "muro humano" de personas que se han sentado alrededor hasta formar un grupo que dificulte el acceso de la policía hasta el centro. Ha sido sobre las 14:30 horas, y desde entonces estas personas continúan en la plaza a la espera de que llegue la Policía para detener a Luis Goñi, quien ha tomado la palabra y, con un megáfono, se ha dirigido de forma breve a los presentes para agradecer su compañía y apoyo.