CASO PUJOL
El expresidente de la Generalitat Jordi Pujol ha callado ante los periodistas que aguardaban a que saliera de su casa al día siguiente de trascender que su esposa, Marta Ferrusola, supuestamente se hacía pasar la "madre superiora de la congregación" para mover el dinero que ocultaban en Andorra.
Con semblante muy serio y sin hacer ningún tipo de comentario, Pujol ha salido de su casa en la Avenida General Mitre de Barcelona hacia las 9.30 horas de la mañana, con el diario El Punt-Avui bajo el brazo y acompañado por un escolta.
Tras cruzar la acera, perseguido por un enjambre de cámaras, Pujol se ha subido a su vehículo y se ha ido del lugar sin comentar las últimas novedades de la investigación sobre la fortuna que su familia ocultó durante años en cuentas de Andorra, que la UDEF ha cifrado en 69 millones de euros en beneficio "no justificado" desde 1990.
Además, según consta en la documentación de la causa, Marta Ferrusola se definió como "la madre superiora de la congregación" en un nota manuscrita en la que en 1995 y en lenguaje en clave pidió a la Banca Reig traspasar "dos misales de mi biblioteca a la biblioteca del capellán de la parroquia", en supuestas alusiones a dos millones de pesetas y a su primogénito, Jordi Pujol Ferrusola.