Partido Popular
El eslogan contra el Gobierno de Pedro Sánchez ha sido el protagonista de la velada. Cuatro afiliados del PP (el más joven, el más mayor, el más veterano y el último en afiliarse) han recibido una cesta de fruta
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha querido seguir con su estrategia y vuelto a tirar de su peculiar eslogan contra Pedro Sánchez "Me gusta la fruta" durante la cena de Navidad del Partido Popular de Madrid, donde, también, ha decidido repartir y obsequiar a cuatro afiliados: al más joven, al más anciano, al más reciente y al más veterano de la formación.
A la cena del Partido Popular de Madrid acudieron casi 1.000 personas entre cargos y afiliados, distribuidos en un centenar de mesas, procedentes de los 179 municipios de la Comunidad de Madrid. Se celebró en el Pabellón Satélite de la Casa de Campo y cada comensal pudo disfrutar de un menú con embutido, empanada de atún y carrilleras con patatas, todo ello al son de villancicos.
Sin embargo, el momento más anecdótico de la noche se produjo cuando Ayuso terminó su discurso y aseguró que habría "fruta de postre", aunque ya se había repartido tarta y dulces. En realidad, la líder del PP quiso repartir cestas de fruta a los cuatro militantes de la formación que habían seleccionado por su representatividad, mencionados anteriormente.
El "Me gusta la fruta" se ha convertido en un nuevo 'ataque' contra Pedro Sánchez que comenzó en la primera jornada de su sesión de investidura en el Congreso de los Diputados. Ese mismo día, Sánchez acusó a la presidenta madrileña de un 'caso de corrupción', un ataque que la propia jefa del Gobierno quiso responderle comentando entre dientes '¡hijo de puta!', desde la zona donde estaba escuchando la sesión. Sin embargo, al viralizarse las imágenes, su equipo ironizaba que lo que realmente decía era '¡me gusta la fruta!'.
Al día siguiente, Ayuso tuvo que explicar lo que había ocurrido en la Asamblea de Madrid: "El presidente de Gobierno, con todo el abuso de poder, usó la tribuna de oradores en la casa donde reside la soberanía nacional, cada vez más mermada, para difamar a un presidente autonómico, para difamarme a mí y a mi familia. A lo mejor ustedes que tragan con todo harían otra cosa, pero yo para mis adentros, sí, lo dije, 'me gusta la fruta'".
Tras este momento, las cestas de frutas empezaron a llegar a la Real Casa de Correos, sede del Gobierno autonómico, para que llegara a la presidenta madrileña, ya como solidaridad o sarcasmo. Además, también comenzaron a hacerse populares hasta merchandising con el eslogan '¡me gusta la fruta!".