Manifestación 8M
La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha señalado este jueves durante un acto organizado por CCOO que la prohibición de celebrar las manifestaciones por el 8M "criminaliza" el feminismo.
Montero ha salido así al paso de la decisión por parte de la Delegación de Gobierno en Madrid de suspender las concentraciones y convocatorias del 7 y 8 de marzo por el Día de la Mujer por "motivos de seguridad" y a causa de la pandemia, algo que la ministra ha tachado de "señalamiento".
Negar la calle
La responsable de la cartera de Igualdad ha asegurado que hay personas que quieren "negar" la calle a las mujeres este 8 de marzo.
No obstante, Montero también ha reconocido que, como miembro del Gobierno, está "obligada a cumplir escrupulosamente con las indicaciones de las autoridades sanitarias y así lo hemos dicho estos días insistentemente".
"España gris y machista"
"A mí, a nosotras, no nos van a encontrar en esa criminalización del movimiento feminista. En el Ministerio de Igualdad van a encontrar una oposición firme a esa España gris, machista, que nos quiere de vuelta a nuestras casa por parte de la extrema derecha", ha afirmado Montero.
Las declaraciones de Irene Montero llegan poco después del desencuentro entre Isabel Díaz Ayuso (PP) e Isa Serra (UP) en la Asamblea de Madrid a cuenta del feminismo y la celebración de actos y concentraciones durante el Día de la Mujer de 2021.
Las explicaciones de la Delegación
Horas antes, el delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, había dicho que "detrás de la decisión de prohibir las manifestaciones el domingo 7 y el lunes 8 de marzo "no hay un cambio de criterio, sino de las condiciones".
"No ha existido cambio de criterio, sino cambio en las condiciones. El problema no es numérico, es la gran acumulación que se producía y el problema de los desplazamientos. Son motivos objetivos, estamos preservando la salud de los madrileños. Nos nos mueven el afán de prohibir nada".