EN FERRAZ

Iceta se reunirá con Javier Fernández a principios de la próxima semana para defender un "tratamiento específico" para el PSC

El líder del PSC ha defendido que se mantenga la hermandad entre el PSC y el PSOE y ha reivindicado que se entienda que el PSC no podía asumir la disciplina de voto del PSOE. Sobre la posibilidad de que el PSOE expulse a los catalanes de los órganos de dirección como medida por la ruptura de voto, Iceta dice que "estar en la dirección tiene ventajas e inconvenientes, dependiendo de para qué se esté".

El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, y el presidente de la Comisión Gestora del PSOE, Javier Fernández, se reunirán a principios de la semana que viene en la sede del partido en Madrid, en la calle Ferraz, para abordar la crisis provocada tras la ruptura de la disciplina de voto por parte de los socialistas catalanes en la investidura de Mariano Rajoy.

Iceta ha llamado la mañana de este lunes a Fernández pero no ha podido contactar con él porque participa en el debate sobre el estado de la región de Asturias, de donde es presidente, pero sobre las 14.15 horas, cuando el líder catalán estaba en un encuentro con los medios fuera de micrófonos ha recibido una llamada del presidente de la Gestora.

Según fuentes socialistas, el tono de la conversación ha sido cordial y amable, y han quedado para reunirse la próxima semana en Ferraz después de que el PSC haya nombrado sus órganos de dirección en su congreso de este fin de semana y ya no se encuentre en situación de interinidad.

Antes de la llamada, Iceta ha ofrecido una rueda de prensa para valorar la primera reunión del nuevo Consell Executiu alumbrado en el congreso del PSC, y ha explicado que, ante la imposibilidad de hablar con Fernández a primera hora, ha contactado con el portavoz de la Gestora, Mario Jiménez, y se ha puesto a su disposición para un diálogo bilateral.

"Ya hemos celebrado nuestro congreso, ahora toca hablar, cuando queráis", le ha dicho Iceta a Jiménez, y ha insistido en que la voluntad del PSC es mantener la relación actual con el PSOE pero se abre a replantearla si así lo desea el partido.

Sobre la posibilidad de que el PSOE expulse al PSC de los órganos de dirección como mecanismo punitivo por la ruptura de voto, ha dicho que "estar en la dirección tiene ventajas e inconvenientes, dependiendo de para qué se esté".

Ha admitido que la relación está dañada pero ha vuelto a advertir de que una eventual ruptura PSC-PSOE se podría entender como que "el PSC se desentiende de España y el PSOE se desentiende de Cataluña", algo que sería un error.

También ha dicho que el hecho de que el PSC quiere que se reconozca a Cataluña como nación no debe complicar la situación con el PSOE porque, según ha dicho, "no es nada nuevo, pues el PSC defiende desde que nació que Cataluña es una nación".

Otra de las cuestiones que deberán abordar Iceta y Fernández es la incorporación de un representante del PSC en la Comisión Gestora del PSOE, una plaza reservada por la situación de interinidad en la que encontraba el PSC hasta el congreso. Iceta ha detallado que son los miembros del PSC en el Comité Federal quienes elegirán a este representante: "¿Cuándo y cómo? Dependerá de las conversaciones pendientes con la Gestora".

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